El incendio de un piso, ocurrido en la noche del martes en Picassent, ha desvelado uno de los misterios más comentados en la localidad a la hora del café: el paradero de las figuras que cada año se robaban en el belén que el ayuntamiento instala en Navidad frente a la casa consistorial. Pese a que sólo se han hallado tres piezas (un pastor, una gallina y un borreguito), se desconoce si había más que han sido pasto de las llamas, puesto que los elementos están elaborados en cartón piedra.
Tras el descubrimiento, la Policía Local interrogó a los inquilinos de la vivienda sobre la presencia de las tres figuras. Los habitantes del domicilio afectado, que quedó totalmente destruido por el fuego, negaron haberlas sustraído y sólo señalaron que «se las había regalado un amigo», tal como ha podido saber Levante-EMV de fuentes de la localidad.
El siniestro se produjo al filo de la medianoche del martes, cuando se desató un incendio en el interior de la vivienda por causas que aún se encuentran bajo investigación. En esos momentos no había nadie en el domicilio y el fuego avanzó con rapidez hasta consumir por completo el piso. De hecho, las llamas alcanzaron tanta virulencia que obligaron a evacuar el edificio y a impedir el acceso durante toda la noche a las nueve familias que residen en el inmueble.
Al día siguiente, varios técnicos municipales acudieron a la finca para comprobar si ésta había sufrido daños estructurales y se encontraron con la sorpresa. Nada más entrar en la vivienda descubrieron tres figuras de cartón piedra que enseguida identificaron como el mismo pastor, la misma gallina y el mismo borrego que un día pertenecieron al belén municipal y que, una noche, misteriosamente desaparecieron de la plaza en la que estaban instaladas.
