El Ayuntamiento de Burjassot ha hecho público, en el Portal de Transparencia, el borrador de la ordenanza sobre Bienestar, Sanidad y Protección Animal para que la ciudadanía pueda contribuir a la elaboración definitiva con sus sugerencias o aportaciones.

Tal como explicó la concejala de Bienestar Animal, Olga Camps, el consistorio quiere «una ordenanza en la que quede reflejada la protección animal para con nuestras mascotas» y «qué mejor que hacerlo que contando con la participación de los ciudadanos». Se trata de ofrecer a los vecinos, «en pro de la transparencia municipal, base de la gestión del equipo de gobierno, una oportunidad de participar».

La aprobación comportará la derogación de las vigentes ordenanzas reguladoras de Tenencia de Animales y de Tenencia de Animales Potencialmente Peligrosos, cuyos contenidos contempla revisados el nuevo texto. De hecho, según recoge en su preámbulo, el consistorio tiene el propósito de convertir a Burjassot en «un referente en protección animal para que la convivencia entre sus ciudadanos y los animales que comparten el entorno urbano se produzca con pleno respeto para ambos».

Además, consciente de que las especies del entorno familiar ya no se limitan a perros, gatos o aves, sino que ha habido un aumento de otras exóticas y silvestres, el ayuntamiento «pone mayor énfasis para luchar contra la cría y venta ilegal de animales, el uso de animales para peleas, el abandono y maltrato, el control de censado, el control de heces y orines y la realización de campañas».

En cuanto al capítulo de Infracciones y Sanciones, el borrador presenta como novedad la posibilidad de que los infractores sancionados elijan «entre pagar la multa o su equivalente en trabajos en beneficio de la comunidad», como ya avanzó en junio la concejala Olga Camps.

De acuerdo con el nuevo reglamento, que aplicaría por analogía lo dispuesto en un convenio suscrito entre el ayuntamiento y la dirección general de Instituciones Penitenciarias, las personas sancionadas podrán optar a la siguiente «fórmula sustitutoria: un día de trabajo, serían dos horas al día de trabajo que equivaldría a 10 euros de multa».

En lo que respecta a las sanciones económicas, el ayuntamiento propone mantener la misma de la vigente ordenanza: para las infracciones leves, apercibimiento o multa de 30 a 600 euros; para las graves, multa de 601 a 6.000 euros, y para las muy graves, multa de 6.001 a 18.000 euros.