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Una década de salvaguarda del Túria

La declaración del parque natural fue fruto de años de movilizaciones y salvó uno de los enclaves metropolitanos más valiosos de la especulación urbanística - Medio Ambiente anuncia que ampliará la protección a Bugarra, Gestalgar y Loriguilla

Una década de salvaguarda del Túria

El gran incendio del verano de 1994 y el proyecto secreto para urbanizar medio bosque de la Vallesa fueron los dos hechos clave que provocaron que la Generalitat Valenciana tuviera que proteger los bosques y las huertas que abrazan el río Túria, desde Valencia hasta Pedralba, y declarar esos espacios de alto valor parque natural. El primero, porque el fuego devoró un tercio del bosque de Paterna y generó un movimiento social y ecologista que aún perdura. El segundo -era un proyecto que el exconseller Rafael Blasco negociaba con la familia Trenor- porque la reacción de los municipios y las fuerzas políticas de todos los signod fue tal contra el Consell que el presidente Camps tuvo que darle un giro a sus planes.

El resultado fue que el 13 de abril de 2007 y siendo conseller de Medio Ambiente Esteban González Pons, el Consell otorgaba la máxima protección ambiental autonómica a un área que abarca los términos de Quart de Poblet, Manises, Paterna, Riba-roja de Túria, l´Eliana, Vilamarxant, Benaguasil, Llíria y Pedralba. Y además ofrecía la dirección del parque a la propia Coordinadora en Defensa de los Bosques del Túria, que la delegó en su vicepresidente y biólogo José Vicente Pardo. Con la protección se reconocían los valores ambientales, los paisajísticos y los patrimoniales, ya que el parque encierra desde una amplia red de trincheras de la Guerra Civil hasta el yacimiento de la Lloma de Betxí.

Los primeros años fueron de tira y afloja constante por los escasos recursos que las entidades consideraban que se dedicaba al parque natural y, sobre todo, por la campaña de talas «salvajes» que el Consell autorizó a realizar a las compañías eléctricas de los pinos bajo los tendidos, que supusieron una importante pérdida de masa forestal. Con los años y sin dejar la protesta, han llegado más medios contra incendios, actuaciones de clareo en las zonas que se quemaron y cuyo crecimiento irregular provocaba una masificación de pinos que no crecían, e incluso acuerdos con los dueños privados del suelo, los Trénor en su mayoría, para acceder a esos espacios y actuar.

El director general del Medio Natural y Evaluación Ambiental, Antoni Marzo, explica que el parque del Túria tuvo en los inicios un cierto presupuesto, que quedó mermado casi en un 80% a partir de 2010. Por ello, uno de los objetivos del nuevo gobierno es dotarlo de más recursos.

El principal objetivo del Consell en este espacio es revisar el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) de forma que, entre otros aspectos, se produzca una ampliación del parque natural hasta el pantano de Loriguilla, lo que implicaría integrar espacios también de Gestalgar y Bugarra, «siempre contando con el consenso de ayuntamientos y entidades de la zona». El objetivo es que el documento básico el PORN se acabe de elaborar en abril y que, tras su tramitación, se apruebe dentro de un año.

Las prioridades

Además, Marzo se ha marcado tres retos prioritarios. El primero es mejorar la conservación de las riberas y las huertas del Túria, con la eliminación de la caña foránea, para lo que reclama más implicación de la Confederación Hidrográfica del Júcar. Además, pretende dar una solución a las infraestructuras del Parque Fluvial, que construyó el Ministerio de Medio Ambiente, a través de la CHJ, y que ahora nadie mantiene. Y finalmente, Marzo indica que con un nivel de visitantes cercano al millón de personas al año es necesario regular los usos por los conflictos que generan los ciclistas deportivos a cicloturistas, peatones o jinetes.

En el lado de la sociedad civil, la Coordinadora de los Bosques del Túria sigue siendo el principal agente social. Uno de sus directivos, Francisco Pellicer, explica que han pasado de la reivindicación a la implicación en proyectos en el bosque con escolares o discapacitados de Camp de Túria y l´Horta. También reclama más medios en prevención de incendios «que son más baratos y más eficaces que comprar más aviones». Y en la Junta de Barrio de la Canyada, el presidente recuerda que sigue pendiente el sendero de pequeño recorrido que pidieron además de insistir en más medios de control y vigilancia. «Se han suavizado las talas y el Ayuntamiento de Paterna ha hecho clareos, pero siempre pediremos más recursos», explica el presidente José Carot.

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