Cerca de un centenar de personas se manifestó el pasado sábado en el Barrio del Cristo contra las actividades taurinas que se celebran en este núcleo al grito de eslóganes como "la tortura no es cultura"

La iniciativa partió de un grupo de animalistas de Quart de Poblet y a ella se sumaron personas de otros municipios que defienden los derechos de los animales y se oponen a los espectáculos con toros que se organizan, desde que hace unos años se recuperaron, en el Barrio del Cristo. "La tortura como diversión: la vergüenza de un pueblo" era el texto de la pancarta principal.

Los convocantes han denunciado que grupos de taurinos acudieron a reventar la protesta, que contaba con todos los permisos pertinentes de la Delegación del Gobierno. "No nos dejaron ni leer el manifiesto. Empezaron a gritar, a silvar y a rodearnos. Hubiera hecho falta más medios policiales para controlarlos", explican las organizadoras.

De este modo, los animalistas fueron insultados y ridiculizados por algunos vecinos "cuando los que teníamos la autorización y estábamos dentro de la legalidad éramos nosotros y ellos no". Algunos de los que acudieron a reventar la concentración icluso escenificaron pases de toreo con una bandera española como capote.

La tensión fue tal que finalmente los animalistas tuvieron que ser escoltados a los coches a petición suya. No obstante, el grupo avanza que el año que viene volverá a protestar.