Uno de los sectores emblemáticos de la industria de l'Horta Sud es el asociado a la madera y el mueble, así como sus empresas auxiliares, que llegó a emplear, en sus tiempos de auge a cerca de 30.000 personas y del que actualmente viven apenas unas 2.000, según los responsables del estudio.

Si bien casi todos los municipios albergaban empresas, el llamado Triángulo del Mueble fue una marca propia acuñada en Alfafar, Sedaví y Benetússer, que llegó a convertirse en el principal productor de España. «Sin embargo, este predominio se ha modificado drásticamente: lo escalonado del proceso hizo que primero fuese expulsada la producción aunque se mantuvo el montaje y la comercialización; en una segunda fase también la deslocalización se llevó por delante el montaje, para desembocar en la actualidad en una desaparición generalizada que solo mantiene cierta preeminencia en la comercialización de la marca», señala el estudio.

La crisis que arrancó en 2008 fue el factor definitivo para situar el sector del mueble, de la cúspide de la producción y generación de riquezas en la comarca, al cuarto lugar que hoy ocuparía. Eduardo Amer indicó ayer que, desde 2015, cuando se inicia un proceso de recuperación que se ha mantenido en los dos años siguientes, el del mueble es el único sector que aún pierde ocupación.