Los peces han dejado de ser simplemente un animal acuático a partir del lamentable fallecimiento del niño Gabriel. Apodado cariñosamente por su familia «el pescaíto» por su pasión por los peces, fue su madre la que pidió en redes sociales que se mandaran peces con mensajes, primero para intentar encontrar al niño y después para recordar su memoria tras conocerse el fatal desenlace.

Cosas del destino, o al menos así lo piensan en la Falla Poble de Beniparrell, la única que hay en esta pequeña localidad de l'Horta Sud de apenas 2.000 habitantes , el monumento infantil va dedicado al mar y está lleno de ninots de peces.

«Los niños y niñas de la comisión cuando vieron la falla empezaron a decir que esos peces eran para Gabriel y casi sin darnos cuentas todos empezaron a decir que era la falla de Gabriel», cuenta la presidenta de la falla, Mari Carmen Pérez, casi sin poder contener las lágrimas.

Así que sin pensarlo dos veces han decidido darle oficialidad a ese sentimiento infantil que surgió de forma espontánea y ayer por la tarde, en torno a las 18.30 horas, toda la comisión arropada por el vecindario, realizaron un acto en homenaje al niño almeriense que fue asesinado.

Ayudados por las falleras mayores Alejandra Bernal y la niña Inés Hernández, y el presidente infantil Abel Lunar junto a la presidenta Mari Carmen Pérez retiraron la lona que cubría la falla infantil, y colocaron un cartel entre dos farolillos encendidos donde se dedica este monumento a Gabriel, ante el aplauso y la emoción de los asistentes, que han hecho suyo el dolor de una familia por el fallecimiento de un niño que realmente no conocían. Una solidaridad que la falla Poble de Beniparrell quiere hacer llegar a la familia de Gabriel, a su madre Patricia Ramírez y a su padre Ángel Cruz, en estos duros momentos.

Por eso, no contentos con esta iniciativa, la única comisión de Beniparrell quiere hacer llegar uno de estos ninot de peces a la familia. «Hemos decidido entre todos que queremos indultar uno de los peces y enviárselo a la familia. El artista fallera se ha ofrecido a hacerle un pedestal para que lo puedan colocar donde ellos quieran», afirma Mari Carmen.

Sin embargo, la dificultad estriba en que no saben cómo contactar con la familia o con algún allegado para saber dónde pueden enviar este pez y que su especial iniciativa no quede en saco roto.

«Estamos intentándolo a través de las redes sociales pues se han creado muchos grupos de apoyo a la familia y también a través de los medios de comunicación, de verdad si alguien puede facilitarnos información que se ponga en contacto con nosotros», ruega la presidenta de la comisión, que espera tener éxito en su misión, «sobre todo porque ha surgido espontáneamente entre los niños y niñas, que nos han vuelto a dar una lección a todos de solidaridad».