Dentro de unas semanas se cumplen tres años de la puesta en marcha del sistema de fotorrojos en Catarroja, Sedaví, Picanya, Beniparrell y Massanassa. Quejas, sanciones y muchos euros ha llovido, desde que en diciembre de 2014 la entonces presidenta de la Mancomunitat de l'Horta Sud, la popular Soledad Ramón, adjudicará el contrato por cuatro años por casi un millón de euros.
Así, según el último informe de recuento facilitado por el ente supramunicipal, de junio de 2015 abril de 2018, se han registrado un total de 57.582 expedientes sancionadores a conductores por saltarse el semáforo rojo. Esas sancionen se han traducido en unos ingresos globales de 3.910.616 euros. En este sentido, cabe reseñar que la adjudicataria se queda con el 20% de cada multa por los trámites de gestión.
Desglosando las cifras, las 57.582 multas suponen una media de 1.645 al mes y 19.194 en cada uno de los tres años. En cuanto a los ingresos, la tendencia se sitúa en 111.731 euros mensuales, por los más de 1,3 millones anuales.
La tabla por municipios la encabeza Catarroja. La media docena de fotorrojos instalados en sus calles han dejado un resultado de 30.505 conductores cazados en estos 35 meses, con unos ingresos para el municipio de 1.962.170 euros. En segundo lugar figura Sedaví, con 12.403 sanciones y una recaudación que supera los 913.000 euros. Massanassa se ha convertido en estos casi tres años, en el tercer pueblo con más multas, al alcanzar las 7.541, dejando en la caja local 541.858 euros. Por su parte, en Picanya, se han contabilizado 5.970 sanciones, que se ha traducido en una inyección económica de 408.924 euros. Beniparrell es la localidad con menos incidencia por los fotorrojos. Apenas ha registrado 1.163 sanciones (33 al mes y 387 al año), con una recaudación total de 84.466 euros.
La concesión de los fotorrojos concluirá en febrero de 2019. En los últimos meses algunos conductores llevaron la multa al juzgado. Los magistrados avalaban el sistema, excepto uno que daba la razón a los usuarios. La Mancomunitat elevó al Supremo un recurso de casación para que determinará qué sentencia es la buena, para tratar de rescindir el contrato, en el caso de que consideraran irregulares las cámaras. Por el momento no hay fallo. En todo caso, el actual presidente, Carlos F. Bielsa, siempre se ha mostrado crítico con un «sistema recaudador» y anunció que no se renovará.
