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Educación

Colapso en el IES de Albal al tener un solo conserje para un alumnado de 1.000 personas

El centro reclama desde hace meses a la conselleria que amplíe el servicio tras una baja laboral y a la espera de la creación de la tercera plaza

Un vecino mira la pancarta que la colgado el centro. levante-emv

La masificación que sufre el instituto de secundaria de Albal en los últimos años no solo ha afectado a la distribución de las clases (en este curso ya hay un turno de tarde) y la ocupación de espacios sino también a otros servicios. El centro ha denunciado el colapso que se vive en las últimas semanas por la existencia de una sola persona en la conserjería, en pleno proceso de matriculación.

Este problema se viene arrastrando en el instituto a lo largo de todo el curso desde que una de las dos personas de la conserjería cayó de baja (ha tenido diferentes sustitutos), lo que finalmente se transformó en un proceso para obtener la incapacidad. «Ahora la plaza ya no puede sustituirse por bolsa sino que tiene que convocarse», indican en el centro.

La situación ha obligado a que en diversos períodos del año haya tenido que asumir el claustro las funciones de conserjería por las tardes (abrir y cerrar la puerta, controlar el acceso o coger el teléfono de la recepción, entre otras) e incluso haya tenido que cerrarse el servicio durante una hora al día. «Pero con la matriculación es imposible por la cantidad de gente que viene a recoger o entregar sobres», indican.

La tercera persona no llega

Además, fuentes de la dirección del instituto explican que, cuando el año pasado se instauró el turno de tarde, «la conselleria adquirió el compromiso de ampliar con una tercera persona el servicio de conserjería» pero esta decisión no se ha materializado. «Hemos reclamado en numerosas ocasiones pero nos explican que la Ley Montoro dificulta la creación de plazas», indican en el centro.

El IES Albal tiene actualmente más de 1.000 alumnos y alumnas que ocupan todas las clases y algunos espacios destinados, en principio, a otros usos. El profesorado teme que, en septiembre, cuando se inicie el nuevo curso, el problema se mantenga «si no se actúa antes», lo que llevaría a una situación peor que la actual.

Tanto la comunidad educativa como el consistorio han pedido en reiteradas ocasiones que el centro se amplíe y, de hecho, el año pasado, al instaurarse el turno de tarde, hubo protestas de las familias afectadas.

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