El conflicto que enfrenta desde hace unos días al gobierno local del PSOE y Compromís de Paterna con el Partido Popular acabó ayer en los tribunales. Los integrantes del grupo municipal acudieron al juzgado a denunciar la forma en que han sido desalojados de su despacho (con una orden que les trasladó la Policía Local, el jueves, y con un candado que les impidió la entrada, el viernes) y también a pedir una medida cautelar para poder entrar antes del lunes, tanto para coger los objetos de carácter personal que aún tienen dentro, como para preparar el pleno extraordinario de ese día, cuyos expedientes están en el recinto clausurado.

De hecho, en la denuncia -interpuesta contra el edil de Compromís Carles Martí por haber dado la orden de desalojarlos-, los populares indicaron que «no tienen acceso a los ordenadores del grupo ni a los correos electónicos ni a las tajetas de la firma digital» lo que les «inhabilita para realizar la tarea de oposición». Además insistieron en que dentro del despacho, «hay 10.000 euros en lotería de Navidad, 600 euros en lotería de septiembre y otros 100 euros para adquirir las sillas de las fiestas». Asimismo, aseguran que tienen agendas, expedientes y objetos personales de los concejales, según la denuncia.

La portavoz del PP de Paterna, María Villajos, opinó que el objetivo del PSOE y Compromís es impedir su labor de oposición y evitar que fiscalicen su labor de gobierno ya que fruto de nuestro trabajo, el alcalde Sagredo y dos tenientes de alcalde se encuentran investigados por un posible delito de prevaricación". "Paterna tiene que saber que aunque pretendan intimidarnos echándonos del despacho, nosotros seguiremos ejerciendo nuestra labor de oposición con trabajo, dedicación y con ilusión. No nos van a callar", aseguró.

La visita al juzgado era la última acción de una tensa mañana en la que los ediles acudieron al despacho a las 8,45 horas y, tras asistir a una reunión en València, se encontraron, a su regreso, con que se había colocado un candado en la puerta de su despacho. Fuentes del gobierno local explicaron a este diario que fue la Policía Local la que adoptó esta medida, ya que tiene la orden de controlar el traslado del PP de su despacho al otro espacio que el gobierno local le ha adjudicado.

El desalojo del PP, que no tiene precedentes en Paterna, está relacionado con la intención de Compromís de quedarse con el despacho, ya que alega que sus seis ediles y dos asesores apenas tienen sitio en el pequeño recinto que tienen desde hace años. Y aunque el PP logró seis concejales en las elecciones municipales de 2015, el abandono de tres de ellos les ha dejado con la mitad de los escaños. Asimismo, el alcalde destituyó, hace unos días, a uno de sus dos asesores. Por tanto, el gobierno local entiende que el grupo popular no necesita un despacho tan grande.

Tras intentar notificar sin éxito a los populares del cambio de despacho (se negaron a recibir el escrito por estar en contra de la medida) a través de un funcionario, Carles Martí les envió la providencia con una pareja de agentes de la Policía Local, como ayer adelantó Levante-EMV. En el parte policial se indica expresamente que la concejala que estaba en el despacho, Marisa Ferre, llamó por teléfono a la portavoz, Flor Maria Villajos, para informarla.

Sobre el desalojo, los populares han indicado que «lo que no cuenta Compromís es que su grupo tiene, en realidad, cuatro despachos, tres para los tenientes de alcalde y uno para el grupo». Por su parte, la coalición tildó de «rabieta» la denuncia del PP por la «reordenación» de espacios.