El municipio de Paiporta celebró el miércoles por la noche el tradicional concierto de San Roc ofrecido por la Banda Primitiva, un acto que estuvo marcado este año por una pitada organizada por parte de un grupo de ultras y otros vecinos contra el gobierno local, en protesta por la actuación del grupo de rock Riot Propaganda el pasado sábado. El contrato de este grupo había sido criticado por el Partido Popular a través de las redes sociales.

Así, antes de iniciarse el concierto, cuando los músicos ya estaban en el escenario, la alcaldesa Isabel Martín tomó la palabra y el grupo comenzó a pitar a modo de protesta. Al observar tal tensa situación, los miembros de gobierno se alinearon al lado de Martín para mostrarle su apoyo. Y después, el público comenzó a aplaudir y a ponerse en pie para acallar los abucheos. También se levantaron a continuación los miembros de los grupos de la oposición. La convocatoria había sido difundida a través de redes sociales. Entre el público, observando la pitada, estaba el líder de España 2000, José Luis Roberto así como miembros del partido de ultra-derecha.

Luis Ródenas, presidente de la Banda Primitiva de Paiporta y exconcejal del Partido Popular consideran «muy mal» que escogieran ese acto. «No es el momento para realizar una protesta así», aseveró. Sin embargo, «al comenzar a tocar, el concierto se desarrolló con normalidad», dice.

Malestar entre los músicos

De la misma forma, algunos músicos apuntan que los ultras «mezclaron un conflicto ideológico con un acto cultural» y que, a pesar de que algunos miembros de la banda sí sabían de la pitada, no esperaban algo «tan desagradable». «Nos quedamos fríos», han reconocido a Levante-EMV. «Todo esto se lo comió la banda, yo no sabía como reaccionar. Pensaba ´yo me levanto y me voy´», añade una de las componentes. «En 40 años no nos había pasado. A pesar de lo desagradable de la situación, los músicos fueron muy educados y estuvieron en su sitio. Al fin y al cabo, estábamos allí para hacer música», valora otro músico.

La alcaldesa de Paiporta, Isabel Martín ha expresado en redes sociales «todo su apoyo a la Primitiva» que tuvo que «aguantar los ataques de grupos fascistas de extrema derecha». Asimismo, la primera edila dijo estar «orgullosa el pueblo que se levantó y acalló los fascistas con sus aplausos».

Fuentes del ayuntamiento han informado de que durante el incidente se llevaron a cabo ocho identificaciones por la Policóa Local y hubo una denuncia por tenencia de arma blanca.

Por su parte, participantes en la protesta han indicado que abucheos «eran exclusivamente para el gobierno local» y no para los músicos de la banda. Así se ha manifestado Paqui Frasquet, quien afirma que «la pitada iba dirigida a la alcaldesa y su gobierno». Por su parte, Daniel Deltoro indica que «en ningún momento» la pitada fue contra la banda.

Desde las filas de Compromís, el diputado Paco Garcia lanzó un mensaje de apoyo a la alcaldesa y a los concejales del gobierno, y pidió a la Delegación del Gobierno que investigue los hechos.