La clavaría de la Mare de Déu dels Àngels celebró anoche su gran passejà. Un acto que incorporó cerca de 60 tiradores de cohetes y que culminó con una gran cena de germanor a las puertas del casal en la que participaron clavarios, "coeters" y amigos y simpatizantes. Sin embargo, los preparativos de uno de los eventos más importantes de la entidad comenzaron ayer por la mañana.
Bien temprado, un grupo de clavarios de esta misma formación festera almorzaba en el casal para coger fuerzas antes de comenzar los preparativos de lo que fue una de las noches más importantes de la clavaría. Seguidamente, los miembros se desplazaron a la Esglèsia del Àngels para recoger la imagen y ponerla a punto para su paseo. Tras unos bocadillos, los devotos acudieron al santuario de Mislata y trasladaron a la Virgen para colocarla en el carro en el que paseó anoche entre fuegos y flores.
Se trata de «un busto espectacular», según los festeros que sustituye al que descansa en la iglesia pues, a pesar de que en tiempos anteriores la clavaría realizaba la passejà con la Virgen original «era muy pesada y algunos de los clavarios decidieron crear una réplica que fuera más manejable», explica un miembro de la entidad. Aún así, la imagen que paseó ayer por las calles de Mislata alcanza los 368 kilos en total. Un peso que soportaban ayer por la mañana entre una decena de personas desde la Iglesia hasta el colegio Sagrado Corazón, donde aguardaba el tradicional carro que la sujetó durante la ceremonia. Todo un acontecimiento de fuego y devoción que movió ayer por la noche a la «gran familia» de la Verge dels Àngels en uno de sus actos más destacados.
Los festeros de la clavaría del Crist, por su parte, también comenzaron ayer los preparativos para el traslado de su imagen, que descansa en el altar que montaron esa misma mañana. Aunque en el momento en el que Levante-EMV visitó el lugar, todavía no lucía colorido y solemne, el Cristo descansa ahora en un ambiente cuidado y preparado con cariño. «Estamos aquí horas para que quede todo bonito, de momento, montar la estructura es lo más importante», explicaba uno de los clavarios. El momento de su «passejà» llegará esta noche con una solemne procesión en la que los implicados cargarán con la imagen a hombros.
