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La Epsar vierte aguas negras a la Acequia de Moncada durante picos altos de lluvia

La planta de la Pobla no puede absorber el caudal fecal y pluvial que llega de forma conjunta desde nueve municipios

Los agricultores de la Pobla de Farnals que miran al cielo que amenaza con descargar fuertes precipitaciones, no lo hacen únicamente por los efectos perjudiciales del exceso de agua, sino también por los 'ingredientes extra' en forma de vertidos fecales que puede acabar en sus campos.

La pasada semana se celebró en la Pobla una reunión a tres bandas: ayuntamiento, dirigentes de la Real Acequia de Moncada y técnicos de la Entidad de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar), dependiente de la conselleria de Agricultura y Medio Ambiente. Tanto el alcalde Enric Palanca como los emisarios de la RAM trasladaron al departamento autonómico las reiteradas quejas que reciben de los agricultores del municipio, cuyos terrenos agrícolas se encuentran en los alrededores de la planta depuradora de residuos. La citada instalación acoge las aguas fecales procedentes de Albuixech, Emperador, la Pobla de Farnals, Massalfassar, Massamagrell, Museros, Puçol, el Puig y Rafelbunyol. Según datos de funcionamiento del pasado año, la planta es capaz de tratar un caudal diario de 30.000 metros cúbicos.

El problema, según alerta Enric Palanca, es que una buena parte de esos nueve municipios no tiene separada la red de recogida de aguas pluviales de las fecales, por lo que cuando «se produce un episodio de lluvia con picos altos, la planta es incapaz de absorber todo el caudal que le llega, y se ve obligada a abrir el sumidero para aliviarse. Pero todo ese caudal pasa a la acequia de Moncada, que si está lloviendo también lleva agua, con lo que se desborda y acaba inundando campos de agricultores con agua pluvial y fecal, con todos los restos que puede llevar».

En términos similares se pronunciaba Ricard Orts, asesor de urbanismo de la RAM. «Tratamos de defender a los agricultores. Entienden que si la planta no puede asumir todo el caudal, se alivie de alguna forma, pero quieren que se logre una solución para evitar que las aguas fecales acaben en sus campos», asegura.

Afrontar la limpieza entre todos

Palanca y Orts admiten que la solución pasa por separar las redes pluviales y fecales de cada municipio, pero coinciden en que es una medida muy costosa y a largo plazo. «La acequia puede digerir un caudal de un metro cúbico por segundo, pero debe estar limpia para que corra bien el agua y no se desborde», indica Orts.

En este sentido, el alcalde de la Pobla anuncia que ha pedido al presidente de la Mancomunitat de l'Horta Nord, José Vicente Andreu, que se fije una reunión con todos los nueve municipios afectados «para exponerles el problema y plantear soluciones a corto plazo». Para Palanca, una de ellas pasaría por «costear entre todos los pueblos la limpieza asidua de la acequia para evitar que se inunden los campos. Todos somos responsables de las aguas que van a la planta y entre todos debemos afrontarlo». Por su parte, el ingeniero de la RAM también plantea la posibilidad «de desviar el sumidero a una acequia que admita mayor caudal que la actual».

Para el alcalde de la Pobla de Farnals , «lo que no se entiende es que cuando se creó la depuradora en su día y se adhirieron los municipios, no se pensara en que no sería capaz de tragar todo el caudal de aguas pluviales y residuales, y que se generaría este problema». Además, Palanca afirma que a «nadie de la Acequia de Moncada se le consultó que aliviarían la planta desembocando el agua en su acequia».

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