La situación a la que se enfrentan las 200 empresas de Fuente del Jarro situadas en la llamada segunda fase, con un solo acceso válido a través de un túnel, ha provocado que en los últimos meses se pongan encima de la mesa diversas alternativas. Mientras el gobierno socialista apuesta por ampliar el paso subterráneo, para lo que ha habilitado fondos para encargar un estudio, Compromís per Paterna planteó ayer al empresariado otra solución distinta más rápida en el tiempo y con inversión menor, que ha sido muy bien acogida.

La coalición valencianista propone dos alternativas de conexión en superficie atravesando las vías del metro de FGV. Se trataría de comunicar la calle Ciudad de Cartagena con Ciudad de Ontinyent y, de forma paralela, conectar Islas Canarias con Islas Baleares. «Estas nuevas conexiones sólo se abrirían al tránsito en caso de emergencias o por la necesidad justificada y supervisada por la Policía Local, únicamente en caso de colapso del único túnel existente», indican.

Así lo explicaron ayer los ediles Juanma Ramon y Carles Martí al gerente de Asivalco, Joaquín Ballester, quien aplaude la iniciativa y considera que debería ejecutarse lo antes posible.

«Alguna solución parecida ya hace tiempo que la ha planteado también algún empresario. Puede sonar raro que en un momento en que se están suprimiendo los pasos a nivel, se plantee aquí hacer dos. Pero estamos hablando de pasos que estarían siempre cerradps y solo se abrirían por decisión de la Policía en situaciones de extrema urgencia», valora.

Ballester ha instado al consistorio a ejecutar estas dos propuestas lo antes posible «porque el día que por alguna razón se corte el túnel por varios días, las empresas se arruinarían y el consistorio podría enfrentarse a indemnizaciones millonarias» además de la situación de peligro que supone tener un solo acceso «cuando se inunda el túnel o si se produce un incendio como el que hubo».

Por su parte, Compromís ha recordado que la reivindicación de hace décadas del empresariado en esta materia nunca ha sido atendida, a pesar de que en 2001 el consistorio anunció la construcción del segundo túnel como una obra inminente. «No podemos dejar a las más de 200 empresas de la segunda fase incomunicadas», manifiesta Ramon.