La coalición Compromís ha denunciado ante la inspección educativa de la Generalitat Valenciana y el Sindic de Greuges lo que considera un «grave adoctrinamiento homofóbico» detectado en el colegio Fasta Madre Sacramento de Torrent Desde la dirección del centro escolar concertado han informado a Efe de que, de momento, no tienen constancia oficial ni han recibido notificación alguna de la denuncia presentada por el partido político.

En la denuncia, Compromís afirma que en el grado superior de Formación Profesional de Técnico de Educación Infantil que ofrece el centro bajo el régimen de concierto educativo se han repartido materiales que «promueven la discriminación» hacia el colectivo LGTB «sin ninguna base didáctica o científica».

Además, afirma, se promueven «informaciones contrarias a la legislación vigente sobre matrimonio entre personal del mismo sexo basadas en perjuicios ideológicos y homofóbicos hacia un determinado colectivo de la sociedad».

En uno de los materiales repartidos al alumnado, el centro afirma, sobre la relación estable entre dos personas del mismo sexo, que «se habla de matrimonio aunque en realidad es incorrecto denominarlo de esta manera, pues el matrimonio significa complementariedad, y entre dos personas del mismo sexo no es posible». Añade que esta relación «acarrea graves perjuicios en la formación de la identidad y personalidad de los hijos, si los hubiere». A juicio de Compromís, estos hechos «comportan graves afirmaciones sobre el colectivo LGTB» y un «evidente delito y fomento del odio» hacia las personas LGTB y sus hijos e hijas.

El concejal de Compromís Víctor Medina asegura en un comunicado que las afirmaciones que se exponen en los contenidos del centro «suponen un grave atentado contra la dignidad y las libertades del colectivo LGTBI». También suponen, añade, «graves falsedades respecto a la legalidad vigente, que reconoce el matrimonio igualitario en derechos y obligaciones al contrario por dos personas de diferente género».

Medina asegura que en 2006 este centro escolar ya fue denunciado por madres y padres que acusaban a la fundación argentina «de ser milicianos católicos que adoctrinan a sus hijos», lo que derivó en una investigación por parte de la inspección educativa de la Generalitat. «Exigimos la retirada inmediata de estos materiales, así como una profunda investigación que ponga luz sobre estos hechos», afirma Medina, que añade que el colectivo LGTBI «no vamos a tolerar ni un paso atrás respecto a unos derechos que han costado lágrimas y sangre conseguir tras siglos de discriminaciones», concluye.