La Plataforma pel Transport Public de l'Horta Sud se ha encomendado al president de la Generalitat, Ximo Puig, en su batalla por conseguir el mismo trato que el resto de municipios del área metropolitana en cuanto a servicio de movilidad. Para ello, las nueves asociaciones de vecinos de Xirivella, Aldaia, Alaquàs, y Barrio del Cristo y Avenida de la Paz de Mislata que conforman la plataforma han remitido una carta a Puig para recriminarle la «dejadez, desidia y olvido» que sufren por parte de su administración.

En la misiva, el colectivo le recuerda a Ximo Puig que cada año salen de los bolsillos de los cien mil habitantes que representan unos dos millones de euros, mientras que de los 115 millones de presupuesto de la Autoridad de Transporte Metropolitano no se destinará «ni un solo euro para acabar con la discriminación que sufre las personas que usamos el transporte público en nuestra comarca». Así, afean a la Generalitat que la propuesta de la conselleria de implantar la zona Metrobus «cuando vengan los 38 millones del Gobierno, no tiene justificación, ya que existen bonos en otras zonas desde hace 30 años sin la financiación del Contrato Programa».

Por eso se dirigen a Ximo Puig, porque la «competencia y la responsabilidad» del transporte público «es de la Generalitat» y no entienden «el trato discriminatorio que recibimos». Así, sostienen que esta misma semana entra en funcionamiento el metro nocturno, «iniciativa que apoyamos completamente», pero «primero hay que corregir las desigualdades, y entendemos que la Generalitat está para solucionar problemas y no para buscar votos». Y exponen sus quejas. «En nuestras ciudades carecemos de metro y el tren de cercanías tarda una media de 40 minutos en llegar a València. Además, el servicio de pasajeros que tenemos, en 98 % son los autobuses de Metro Bus, con unos contratos firmados hace 30 años y caducados desde hace 10 años», apuntan.

En este sentido, detallan que en los tres pueblos en los que residen se producen 4,5 millones de viajes al año, «más del 50% de los desplazamientos en el área metropolitana en Metro Bus». E insisten en los precios. «Cuando subimos al autobús y pagamos 1,45 euros financiamos el coste de nuestro transporte y el de las líneas deficitarias de la contrata, que al coincidir con la línea de metro, tienen escaso pasaje», critican.

Bonos y precios diferentes

No solo el problema está en el billete sencillo, también en los bonos. Así, le recuerdan al presidente Puig que « los bonos que tenemos, de 58,30 euros para todo el mes y de 15,50 euros por 10 viajes, no están al alcance de la mayoría de las personas, y nos vemos abocados a pagar 1,45 euros cada vez que subimos al autobús». En cambio, censuran que poblaciones cercanas tienen «metro con bonos de 10 viajes de 7.20 zona A, como ahora disfruta Paterna, 8,50 euros el de EMT, 9 euros bono trasbordo Metro y EMT, que se financian con fondos públicos que nosotros también contribuimos con nuestros impuestos». Además, inciden en que de los diez millones del Contrato Programa de 2018, «no se ha dedicado ni uno a la integración tarifaria».

Con todos estos datos, la Plataforma pel Transport le hace saber a Ximo Puig «el trato discriminatorio que sufrimos», con «un transporte de mala calidad» y «por el que pagamos el doble que otras poblaciones». Por ello, piden la intercesión del presidente valenciano y que el presupuesto autonómico incluya la integración tarifaria. «Sólo queremos lo que tantos y tantos valencianos disfrutan desde hace años y a nos nosotros se nos niega reiteradamente», concluye la carta.