«Decepción», «jarro de agua fría», «desencanto». Eran las primeras reacciones de algunos de los alcaldes de los municipios por los que discurre la línea ferroviaria C-3 tras salir de la reunión que mantuvieron ayer en Madrid con responsables del Ministerio de Fomento. Este encuentro ha confirmado lo que ya se veía venir en abril de este mismo año, cuando se presentaron los Presupuestos Generales de 2018: los planes para mejorar la C-3 se encuentran en un cajón prácticamente olvidados.

Las esperanzas que se crearon en torno al plan anunciado por el exministro de Fomento, Íñigo de la Serna, con el anuncio del «Plan de mejora de la calidad de Cercanías 2017-2025» se han dilapidado. El que fuera ministro del Gobierno de Rajoy prometió una inversión superior a los 1.400 millones de euros en ese período de tiempo que, entre otros proyectos, incluía la electrificación de la C-3 hasta Utiel, que permitiría que el tren circulara a una mayor velocidad y de forma más segura. Ya en abril llegaron las primeras dudas hacia el plan: los presupuestos generales no tenían prevista partida alguna para ello en los tres próximos años, aunque el programa prometía una inversión total de 320,68 millones de euros.

Ahora, con un nuevo gobierno socialista, Fomento ha confirmado a los ayuntamientos afectados que «hay que empezar de cero», según explicó el alcalde de Aldaia, Guillermo Luján, presente en la cita. «Nos han dicho que el proyecto de electrificación que se estaba haciendo no es válido y que tenemos que volver a empezar. Estamos decepcionados porque se acumulan las promesas incumplidas», lamentó.

En un sentido similar se manifestó el alcalde de Xirivella, Ricard Barberà: «Ha sido un jarro de agua fría porque de las distintas promesas de la pasada legislatura con Íñigo de la Serna no había nada o no sirven porque es necesaria una revisión importante de todo lo que se iba a hacer». «Aún así, seguiremos trabajando juntos», añadió Barberà.

Por su parte, la alcaldesa de Alaquàs, Elvira García, incidió en el «desencanto provocado por las expectativas que se habían creado, que no solo no se han cumplido sino que tampoco eran reales». «Ahora habrá que volver a empezar y redactar los proyectos de temas como la electrificación o la entrada directa a la Estación del Norte de València. Las expectativas ahora mismo están muy lejos de cumplirse», explicó García que, no obstante, agradeció «la sinceridad» de los actuales dirigentes de Fomento.

De este modo, a la vista de lo expuesto por el ministerio, los municipios de la C-3 -Xirivella, Aldaia, Alaquàs, Riba-roja de Túria, Loriguilla, Cheste, Chiva, Buñol, Siete Aguas, Requena, Utiel y Camporrobles (aunque éste no está incluido en la red)- todavía tienen camino por recorrer para disponer de lo que reclaman: «un tren acorde con el siglo XXI».