La Asociación Gats de la Canyada ha condenado «rotundamente» los envenenamientos ocurridos en la zona del barrio de Campamento, en el casco urbano de Paterna, por considerarlo un «delito de gravedad contra la Salud Pública y de maltrato animal».

«Si analizamos bien la situación, siempre cuando pasan estas cosa, siempre hay el mismo caldo de cultivo: vecinos molestos, muchos gatos sin castrar, gatos y época de celo, camadas, suciedad y abandono del lugar en sí agravado por personas que alimentan y no mantienen saneada este punto de alimentación, falta de información respecto al CES, posibles instancias y quejas previas sin procesar y un largo etcétera. El problema que vemos nosotros es que no se habla de gatos», señalan desde la asocación.

Por ello, su conclusión es que «haría falta que todos los implicados vayan de la mano, ayuntamiento, Gespa, asociaciones, protectora y vecinos, para solucionar una gran lista de asuntos pendientes».

Para ello, piden mayor formación de los voluntarios que alimentan, castración masiva en puntos conflictivos, endurecer penas y multas por maltrato animal, más visibilidad de las colonia, o más información y divulgación sobre el método CES.