Un joven de 22 años, con problemas mentales e interno en un centro ocupacional de Rocafort en régimen abierto, ha protagonizado en las últimas semanas varias agresiones a mujeres y niñas a las que aborda en la calle, tanto en este municipio como en la vecina localidad de Godella, sembrando el pánico entre los vecinos. En uno de los casos la víctima, de 31 años, fue golpeada con puñetazos y patadas y ha tenido que permanecer varios días hospitalizada con un traumatismo craneoencefálico.

Asimismo, el pasado miércoles esta misma persona volvió a escaparse de la Residencia y Centro Ocupacional Praga del Instituto Valenciano de Acción Social (IVAS) de Rocafort y agredió a dos menores. Después de agredirlas a una de ellas, de trece años, le arrancó un pendiente de la oreja.

Las fuentes consultadas por este periódico aseguran que el autor de estas agresiones no es consciente de sus actos, «está enfermo y es muy peligroso tanto para los demás como para su propia integridad física». De hecho, ha sido localizado varias veces con una bata azul deambulando entre los vehículos y tratando de subirse a varios de ellos en marcha.

Las policías locales de Rocafort y Godella han tenido que actuar hasta una veintena de veces en poco más de dos años por incidentes protagonizados por este joven. Desde los servicios sociales de ambos ayuntamientos se han enviado informes a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, encargada de la tutela de esta persona, y al propio centro IVAS para que adopten medidas.

Desde la residencia aseguran que no tienen herramientas suficientes para impedir que se escape. Asimismo, hasta hace tres meses un monitor estaba encargado de vigilarlo y acompañarlo siempre que saliera del centro, pero este trabajador ya no está en la residencia.

Varias de las víctimas han denunciado las agresiones en la comisaría de Policía Nacional de Burjassot y el juzgado ya está al tanto de las continuas fugas de este joven y de su actitud violenta. Ahora todo está en manos de que el juez adopte alguna medida de internamiento más restrictiva.

Intentó ahogar a un niño

En febrero del pasado año este mismo joven se escapó del centro y cogió del cuello a un niño de apenas tres años. Según la madre del pequeño trató de asfixiarlo, aunque la mujer finalmente logró proteger a su vástago.

Asimismo, el pasado 30 de enero volvió a actuar agrediendo en cuestión de unas horas a cuatro jóvenes en Godella y Rocafort. Dos de ellas, menores de edad, pudieron refugiarse en un patio de una finca. Peor suerte corrió una mujer de 31 años, a quien propinó puñetazos en la cabeza y las costillas, y tuvo que ser hospitalizada por las lesiones.

«Las mujeres de Godella queremos ir tranquilas por la calle, sin tener que mirar atrás por miedo a ser agredidas», aseguran fuentes vecinales. «Que se tomen las medidas que sean necesarias antes de que se produzca una tragedia.