El Ayuntamiento de Benetússer ha comenzado las labores de saneamiento y limpieza del solar anexo al antiguo molino arrocero, conocido como el solar de Meibel porque esta instalación albergó en su última etapa la fábrica de chocolate. Ha sido el juez quien ha autorizado la entrada del consistorio a esta parcela privada después de que el consistorio instara sin éxito al administrador concursal a que acometiera la orden de ejecución emitida a finales de agosto.
Tras no recibir la petición de ninguna licencia de obras por parte de la empresa en diciembre, el ayuntamiento comenzó los trámites para contratar a la empresa especializada que llevase a cabo los trabajos y finalmente ha sido esta semana cuando han podido acometerlos.
Así se ha empezado eliminando el muro de piedra perimetral muy deteriorado según el consistorio y en la actualidad las máquinas excavadoras se encuentran desbrozando el solar, con especial cuidado con la chimenea-que está al borde del colapso- y el panel cerámico de la fachada principal, que están catalogados como Bien de Relevancia Local, así como el conjunto del Molí-Fàbrica Arrossera de Sant Josep, que figura en el inventario de Bienes Inmuebles de Etnología de la Conselleria de Cultura.
Tras actual sobre el solar, la próxima semana se prevé que comience una segunda fase que se centra en el apuntalamiento del edificio que presenta fisuras y grietas importantes con riesgo evidente de caída de cascotes, así como agujeros en la cubierta que ha permitido la entrada de la lluvia y que ha provocado humedades internas deteriorando gravemente el interior de este molino arrocero construido en 1920 uno de los referente de la comarca en arquitectura industrial de la época. También se sellarán puertas y ventanas.
El Ayuntamiento de Benetússer valoró en una memoria técnica que estos trabajos ascenderían a 50.000 euros. Factura que el consistorio emitirá al actual propietario que irá acompañada con la apertura del proceso sancionador consistente en poner multas a la propiedad, a razón de unos 5.000 euros al mes, si se establece un pago en diez entregas del importe de la obra. En la actualidad, el antiguo complejo industrial y los terrenos del entorno son de un agente urbanizador que está en concurso de acreedores.
Construido en 1921
El «Molí-Fàbrica Arrossera de Sant Josep», como se le conoce técnicamente, es un complejo industrial construido de 1921 con un edificio integrado por el propio molino de tres alturas y dos cuerpos de fachadas simétricas adosados, que conforman un patio «con cerramiento a la calle» con murete y verja de hierro entre pilares de ladrillos. Uno de los elementos más característicos y valiosos del molino es la chimenea de planta hexagonal. El panel cerámico de fachada principal y la chimenea están catalogados como Bien de Relevancia Local (BRL), como elemento etnológico con nivel de protección integral.
El Ayuntamiento de Benetússer intentó a finales del siglo pasado hacerse con la propiedad a través de un convenio urbanístico con los dueños, que llegó a firmarse pero que no se ejecutó. Tras tener que intervenir para evitar la ruina de este bien y ante la falta de predisposición con los propietarios, el consistorio estudia emprender acciones legales para recuperar este bien patrimonial..
