Numerosos pinos situados en el camino del Corral de Manyes de Torrent presentan actualmente bolsas de procesionaria de gran tamaño. Estos ejemplares se sitúan bordeando esta vía de comunicación y también en las parcelas privadas, tanto abiertas como valladas, de toda la zona. Este núcleo está conformado por casitas y chalets con familias que residen todo o parte del año.
Algunos de estos residentes se han dirigido al ayuntamiento para alertar de la situación. «Llevamos aquí viviendo caso 10 años y nunca habíamos visto esto. En nuestra casa, que está un poco más lejos, hemos recogido larvas incluso», explica una de las residentes. Todo este núcleo residencial está situado en el entorno de la Font de Manyes, un paraje que el consistorio recuperó hace años, en etapa del gobierno popular, dentro de las intervenciones en fuentes históricas de las partidas rurales y de la llamada Ruta de l'Aigua.
Los vecinos recuerdan que las larvas de la procesionaria del pino están cubiertas de unos pelos que provocan todo tipo de alergias e irritaciones tanto en humanos como en animales, que en esta zona abundan al tratarse de chalets con parcela. «Casi todos tenemos perros y esto puede ser hasta mortal para ellos, además del daño que también puede causar en las personas», indican.
Por ello, reclaman una intervención urgente del ayuntamiento en toda la zona. De hecho, ya hubo una inspección de la patrilla rural. «Nos han contestado que, al ser terrenos privasos, tienen que ordenar a los dueños hacerlo, y también nos dicen que ahora no es momento de que estallen las bolsas. Pero con el cambio climático ya no podemos estar seguros de nada y no podemos arriesgarnos a que sea tarde», explican.
Además, sobre la titularidad pride los terrenos, los residentes opinan que «ante un caso como este de una plaga tan fuerte, tienen para proteger a la población como alguna vez han hecho en la limpieza de solares».
