La Audiencia Provincial ha confirmado el archivo de la denuncia contra la concejala de Burjassot Lluna Àrias (Compromís) que había sido formulada por el intendente policial, Leopoldo Bonías. La razón era que la portavoz de la coalición valencianista criticó que "una persona abiertamente fascista" pudiera acceder a ser el responsable de un servicio como la Policía Local.

Lluna Arias se posicionó en contra de la posible incorporación por comisión de servicios de Leopoldo Bonías a la jefatura de Policía Local de Burjassot por su talante "abiertamente fascista y con conexiones con la ultraderecha". La edila manifestó que el intendente principal había encañonado con una pistola a una concejala de Xirivella en 1985.

El querellante considó que tales afirmaciones son constitutivas de un presunto delito de injurias y calumnias, ya que se le atribuye un delito de atentado, cuando por el caso fue sancionado por la vía administrativa, a un año y medio de suspensión, por una falta de desobediencia. Inicialmente hubo un acto de conciliación en el Juzgado de Paz de Burjassot pero al no haber pacto porque el policía no acudió el asunto derivó en un proceso judicial.

La jueza no ha encontrado indicios de delito y ha sobreseído la denuncia del Bonías que acusaba Àrias de injurias y calumnias. Según la magistrada las expresiones de la regidora se basaban en informaciones periodísticas, respecto a las cuales no se había solicitado ninguna rectificación previamente.

Ante el posible nombramiento de Bonías como jefe de la Policía Local, la portavoz de Compromís se mostró públicamente preocupada porque una persona con «asuntos que no se han llegado a judicializar», pudiera acabar siendo el intendente de este cuerpo de seguridad. Un perfil, según la regidora, al que Compromís no iba a conceder un lugar de responsabilidad «y menos, uno que comporta ir armado».

Después de conocer el archivo de la causa, Lluna Àrias se ha mostrado «satisfecha por el fin de un proceso judicial que nunca tendría que haberse iniciado». Según Àrias, sus declaraciones formaban parte del ejercicio democrático y el discurso político, y «como portavoz de mi grupo municipal volvería a denunciar cualquier indicio o comportamiento que amenazara la convivencia y tolerancia en Burjassot. Hay que actuar de manera valiente y decidida, y en Compromís siempre nos mantendremos firmes en la lucha contra el fascismo».