En febrero del 2016 la Consellera de Vivienda, María José Salvador, anunció la puesta en funcionamiento de la Regeneración y Renovación Urbana (ARRU) en el barrio de La Coma, barrio compuesto por viviendas del parque público de la Generalitat Valenciana. Esta actuación suponía la realización conjunta de obras de rehabilitación de edificios y viviendas, que incluirían la adecuación de zaguanes y cuartos de suministros eléctricos y de agua; la reparación de la red de saneamiento; la modernización de ascensores; mejoras en accesibilidad y alumbrado; la rehabilitación integral del edificio de la calle Yesa número 1 y la reestructuración y adecuación de espacios públicos.

A todas estas actuaciones prometidas por la consellera de vivienda, María José Salvador, habría que incluir la reparación de 120 viviendas, 25 urgentes y el resto vandalizadas. Todo forma parte de un Plan de Dignificación del parque público de viviendas impulsado por la Conselleria, además de un Plan de Intervención Sostenible, con el objetivo de revitalizar el entorno urbano, con jardines y parques para el barrio.

Tres años después de las promesas, y ya comenzado el año 2019, por fin se ha puesto en funcionamiento las obras del Plan ARRU, pero muy menguado de sus expectativas iniciales. Consultado el proyecto impulsado por la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVhA), entidad dependiente de la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, el actual ARRU en ejecución se limitará a las sustitución de las bajantes sanitarias y pluviales, especialmente por debajo de los forjados de la planta baja, a la adaptación de los accesos a los zaguanes y, por último, a la reparación de ascensores.

"Quedará pendiente la rehabilitación integral del edificio en la calle Yesa número 1, el ajardinamiento de los espacios exteriores, la reparación de los espacios interiores de los edificios y, un plan integral de accesibilidad para el barrio, pues recordemos que en las aceras existen 32 escaleras sin rampas alternativas, necesarias para personas con movilidad reducida, así como innumerables escalones sin un vado o rampa. También faltará la recuperación de espacios como los solares junto a los colegios, las reparaciones en el alumbrado público de las calles y plazas, la instalación de mobiliario urbano como bancos, contenedores de reciclaje, papeleras, barandillas en escaleras y marquesinas en las paradas de autobús. Todo lo cual es muy necesario para evitar el proceso de exclusión social que se incrementa día a día en un barrio con el mayor porcentaje de menores de Paterna", dicen desde Podemos.