El Ayuntamiento de Catarroja sigue en el proceso para crear un protocolo contra la prostitución que afecta sobre todo a la zona del polígono. En dicho proceso, esta semana tuvo lugar otra reunión del equipo multidisciplinar, formado por profesionales de diferentes ámbitos que trabajan en la intervención directa con víctimas de violencia de género y de explotación sexual como la Policía Local, personal de Servicios Sociales o de Igualdad, miembros del Espacio Labora (Servef), del Centro de Salud, de la Oficina de Atención a Víctimas de Violencia del Delito y de la Guardia Civil de Alfafar.
En esta ocasión se invitó a la reunión de trabajo a una representante de la Fundación Apip-Acam, quien hizo una presentación de cómo trabajan directamente con víctimas de prostitución, en València y en la Pista de Silla fundamentalmente, a fin de poder establecer futuras medidas para una coordinación con los recursos municipales y comarcales, también en este sentido.
Esta asociación que trabaja directamente con mujeres prostituidas, explicó «que están cambiando los usos, ya que la prostitución está, poco a poco, despareciendo en la calle porque se suben a pisos donde es mucho más difícil el trabajo de la fundación porque no se ve si no hay incidencias o chivatazos», explica la primera teniente alcalde, Lorena Silvent.
La fundación planteó al consistorio que un aspecto en el que, a lo mejor, no se hace mucho hincapié pero que requiere de la colaboración de todos, es el fomento del empleo entre estas víctimas de la explotación sexual. Así, la fundación Apip-Acam se compromete a informar de las mujeres prostituidas que estén empadronadas en Catarroja y hacerle hacerles llegar el currículum vitae para que el consistorio las pueda « incluir en los itinerarios laborales que ya existen dentro de los programas de empleo, así como en la escuela de adultos donde pueden recibir clases de idiomas, por ejemplo, para la las mujeres que no hablan español», explica Silvent.
Compromiso municipal
El Ayuntamiento de Catarroja ha mostrado la necesidad de poner en marcha un plan de actuación conjunto entre administraciones para prevenir la violencia machista y, más concretamente, hacer frente a la prostitución de los alrededores de la Pista de Silla. Así se lo comunicó la edila a la responsable de la Unidad de Coordinación contra la Violencia hacia las Mujeres, Carla Mercé, durante la presentación del equipo multidisciplinar presentado en noviembre. Silvent ya propuso entonces el establecimiento de unos protocolos de actuación conjuntos ante este problema que afecta tanto al mismo municipio, como varios pueblos de la comarca. Según la regidora, «las mujeres prostituidas son un caso de violencia de género evidente y, por eso, hay que establecer un protocolo municipal. Hay que poner en marcha una actuación asistencial a las mujeres y de publicidad, poniendo como foco a los consumidores de sexo».
