Aunque nunca pensó que llegaría tan lejos y su liderazgo se prolongaría tanto, el socialista Josep Almenar cumple 40 años en la corporación como edil, de los que 36 son como alcalde. Entró en 1979 de la mano de Ciprià Ciscar, que tenía la alcaldía, como concejal responsable del área socio-cultura, educativa y festiva. Cuatro años después, lideró la lista y revalidó el resultado de triunfo contundente.
Almenar ha ganado todas las elecciones municipales a las que se ha presentado y ha llegado a tener 10 de 13 ediles en el mandato de 1999 a 2003. La legislatura de 1995 y 1999 es cuando más árboles plantó el consistorio. Ahora el pleno tiene 17 escaños por el crecimiento de la población.
Asegura que de lo que más satisfecho se siente es del modelo de ciudad que ha implantado y ha ido construyendo «amable, verde y equilibrada», basado en los pueblos y ciudades de determinadas zonas de Francia o Alemania, aunque envuelto por la singular huerta valenciana.
«Hemos trabajado en la dinámica social, con programas y acciones para las personas, y en la dinámica del entorno, con arbolado, zonas verdes, murales artísticos, mejoras en calles y plazas, en el barranco y otros», indica. En sus primeros años de alcalde recorría Europa en busca de ideas, hoy sigue las películas europeas de TVE para ver paisajes, espacios e ideas. «En Viena hay 60 metros cuadrados de zona verde por habitante. Nosotros tenemos 25 por lo que aún podemos crecer. Allí tienen 1.500 kilómetros de carril bici. Nosotros tenemos 25 kilómetros», indica. El último tramo ha sido la conexión con Xirivella y ahora queda la de Alcàsser.
En su programa electoral, el proyecto estrella será construir un nuevo teatro-auditorio.
