El pleno del 8 de abril dio luz verde al Documento Inicial Estratégico propuesto por la Agrupación de Interés Urbanístico de la Font Baixa con los votos a favor del PP, Cs y la abstención del PSPV.
El alcalde, Juan Ramón Adsuara (PP), admite que su grupo dio el «sí» al plan de reforma porque «contempla más de 37.000 m2 de zonas verdes» ya que «se proyecta una especie de parque central grandísimo a beneficio de Alfafar», además de « 21.000 m2 de equipamientos públicos y más de 18.000 m2 de viales».
El primer edil descarta la propuesta de mantener y recuperar esa zona de huerta como propone Compromí porque la zona Font Baixa, situada en el casco antiguo de Alfafar, entre la avenida de la Albufera al norte y la avenida Reyes Católicos al sur, fue clasificada como suelo urbano en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) aprobado en 1992 y «la revocación de lo dispuesto en el PGOU obligaría al consistorio de Alfafar a indemnizar con alrededor de 146 millones de euros a los propietarios de los terrenos, teniendo en cuenta que el precio de 1.042, 8 euros por m2. Algo inasumible».
En cuanto al modelo urbanístico presentado por el AIU que incluye 36 bloques de mínimo 8 alturas, Adsuara considera que son solo propuestas. «Ni han pedido una derrama a los propietarios. Un proyecto así se ejecutará a 15 años vista y de aquí a entonces el modelo cambiará», se muestra convencido el alcalde.
Según el consistorio, el proyecto definitivo de la reforma se elaborará «teniendo en cuenta los derechos de los propietarios de los 140.000 m2, el respeto y consideración a los elementos patrimoniales e históricos de la zona, así como a la sostenibilidad, eficiencia, innovación y cohesión social entre otros criterios fijados para el desarrollo del Plan Inicial de Reforma».
«No atiende a la movilidad»
En el pleno, parte de la oposición votó en contra al plan menos el PSPV que se abstuvo. «Nosotros sí que estamos de acuerdo es que esa zona se deba urbanizar, porque está muy degradada y en el PGOU es suelo urbano, pero no estamos conformes con el modelo urbanístico presentado y por eso nos abstuvimos», señala el edil José A. Redondo.
Según el PSPV, el primer modelo presentado era mucho más armónico, no excedía de tres alturas, con viales y calzadas anchas, más o menos con una visión del urbanismo que queremos en siglo XXI, con grandes calles con carril bici y patinetes, y delimitando las zonas dotacionales, no como el 'mamotreto' presentado ahora».
Redondo explica que el motivo por el que la AIU modificó el primer plan «es porque Compromís criticó la falta de un pulmón verde y ellos ha dado más espacios a zonas verdes sin renunciar al número de viviendas previstas, lo que les obliga a reagruparlas en edificios de más alturas, generando justo el efecto contrario».
Para el PSPV si se quiere construir un parce central al estilo Valencia «hay que plantearlo de otra forma». «Vamos a proyectar bien una zona verde desde el principio con todos los urbanizadores pero no dejes ahí un gran espacio para grandes fincas, que luego solo se urbanizarán cuatro y eso quedará ahí desligado del resto», dicen.
