El Ayuntamiento de la Pobla de Farnals ha dado otro paso para solucionar un problema enquistado durante treinta años en su primera línea de playa: el edificio Áncora. El plazo para recibir ofertas para su subasta concluyó hace unos días y solo una empresa ha presentado propuesta oficial, según ha confirmado a este diario el alcalde socialista Enric Palanca. A partir de hoy, con la constitución del nuevo pleno, el ayuntamiento abrirá la plica para conocer el importe exacto de la puja, el mínimo era 1,5 millones de euros, además de certificar que la ofertante cumple con todas las condiciones incluidas en el pliego. En el caso contrario, se declararía desierta la licitación y se articularían los mecanismos para repetir el proceso.
El pleno municipal aprobó el pasado diciembre sacar a subasta el edificio Áncora, un inmueble de cinco alturas situado en el mismo paseo marítimo de la Pobla de Farnals. La medida era la solución a un complejo que lleva abandonado desde hace tres décadas. Una constructora inició las obras, pero sobre una parcela que el PGOU tiene catalogada como de uso terciario y no residencial para apartamentos privados como pretendía. La empresa abandonó los trabajos y los 80 propietarios se quedaron colgados.
Ya en 2010 y tras las reiteradas quejas de los vecinos del entorno del Áncora, por suciedad y plagas de insectos y roedores, se puso sobre la mesa convertirlo en hotel, pero los 80 propietarios no lograban ponerse de acuerdo.
Todavía bajo el mandato del PP, con José Manuel Peralta en la alcaldía, se tomó la decisión de encontrar una salida. El nuevo alcalde, el socialista Enric Palanca, ha seguido con el proceso para solucionar la patata caliente. Así, el pleno aprobó iniciar la venta forzosa del edificio por precio de salida de 1,5 millones de euros. Tras los trámites administrativos y de exposición pública, se abrió un plazo para que los interesados presentasen ofertas. Finalizado dicho período, solo una mercantil ha pujado por el inmueble.
La plica no está abierta todavía
Pese a que al plazo para ofertar concluyó el pasado 21 de junio, el consistorio ha querido esperar a la constitución del pleno que se celebra hoy para abrir la plica, aunque no hay fecha concreta.
Desde que se anunciara la subasta del Áncora, han sido muchas las empresas que han solicitado formalmente información para pujar por el edificio, aunque finalmente solo una ha concurrido. Este interés ha podido provocar que la ofertante haya aumentado el precio inicial de 1,5 millones. La tasación y peritaje del terreno para fijar esa cantidad lo realizó una consultora externa.
¿Y qué pasa a partir de ahora? Lo primero será abrir el sobre para comprobar que el precio de compra alcanza el mínimo exigido, y posteriormente certificar que la empresa ofertante cumple con todas las condiciones que exigía el pliego, además de cerciorarse de su solvencia económica para afrontar la operación. En este sentido, cabe recordar que la cantidad final por la compra forzosa del Áncora se repartirá al 50% entre el Ayuntamiento de la Pobla, en concepto de los aprovechamientos urbanísticos de la zona -hay una parcela anexa de propiedad municipal-, y los antiguos propietarios que adelantaron un dinero por unos apartamentos que no va a poder disfrutar.
Por su parte, el inversor se compromete a convertir el vetusto edificio de cinco alturas en un complejo de uso terciario, ya sea en forma de hotel o de apartamentos turísticos. En este sentido, el futuro propietario tendrá en sus manos dos opciones: derribar el actual inmueble y levantar uno nuevo o bien, aprovechar la actual estructura y finalizar las obras. Cabe puntualizar que el informe elaborado por el arquitecto municipal ha determinado que el estado de la edificiación es óptimo para su reutilización.
