El colectivo Alaquàs Debat ha cerrado el curso con un acto sobre el crecimiento de las desigualdades en el mundo y el auge de las nuevas formaciones políticas populistas y de extrema derecha, para lo que contó con la participación del geógrafo, profesor y autor Joan Romero, que participó en una cena coloquio con ochenta personas.

Romero defendió, en la línea de lo que lleva haciendo en los últimos dos años, que Europa tiene una "crisis existencial" y que una gran parte de su población (la que se situaría en el sector de las clases medias) sufre "incertidumbre, inseguridad y resentimiento". "Millones de europeos están muy descontendos", aseveró.

El profesor recordó que en 1958, cuando se fundó la Unión Europea, se sentaron en la misma mesa dirigentes de países que hacía poco se habían matado unos a otros en las trincheras para garantizar un futuro en el que no se repitieran las guerras. "Y tuvieron éxito, mucho éxito. La prueba es España", dijo a lo largo de su intervención.

En la actualidad, ese escenario se ha desvanecido porque no existe la unión política y porque, desde el punto de vista económico, Europa ha perdido su hegemonía frente a dos gigantes: el mercado norteamericano y el asiático. En ese contexto, Romero lamentó profundamente que las últimas decisiones en la Unión Europea hayan consistorio en seguir con el modelo neoliberal que ha puesto en peligro el Estado de Bienestar que se construyó con las políticas de cohesión social aplicadas en décadas anteriores.

En este escenario de grandes descontentos y una crisis que afectó profundamente a las clases medias (de las que dijo que actualmente él distinguía hasta ocho sectores), han surgido populismos por la izquierda y la derecha así como fuerzas de ultraderecha. De estas últimas, indicó que tienen factores diferenciales en cada zona pero les unen características como el sentimiento antiinmigración. En el caso de España, el experto reconoció no estas seguro de que Vox represente el mismo modelo que la ultraderecha actual en Europa porque "tiene un 70% de componente franquista".

Sobre las diferentes corrientes sociales antisistema que se están produciendo en Europa, Romero fue contundente al afirmar que solo hay dos grandes movimientos en las últimas décadas que puedan considerarse como tales, el ecologista y el feminista."El resto son revueltas", dijo.

En el apartado de preguntas, los y las asistentes le interpelaron sobre qué se entiende actualmente por clase media, si la universidad está preparada para construir un nuevo modelo, cómo afectan los nuevos populismos a la comarca de l'Horta, cómo valoraba el aumento de mayorías absolutas en el área metropolitana de València, la influencia de los 'lobbies' en la evolución de Europa, el papel de la educación y la tarea que ha de desempeñar Europa en la redistribución de la riqueza global.