«Alberto celebra hoy su cumpleaños, pero él no se acuerda, tiene 80 años y lleva toda la vida en su pueblo, Quart de Poblet. [...] A veces recuerda muy bien cómo era Quart antes, cómo era la avenida sin asfalto... algunos días, Alberto, no recuerda nada». Alberto es un personaje ficticio con alzheimer al que los alumnos de tercero del colegio San Enrique le dan vida en el documental «Quart de poblet, un pueblo para recordar», una obra que ha recibido el primer premio en el eMove Festival. La cinta recoge la historia del municipio, las actividades y servicios que ofrece, y transmitirlos a los mayores que sufren alzheimer, una enfermedad que los alumnos conocen y de la que se les quiere concienciar.
El alumnado se implicó de lleno en la participación del cortometraje aportando sus ideas sobre el pueblo y aprendieron el trabajo de técnicos de sonido y de grabación. En el relato aparecen sus propias voces describiéndole a Alberto, como si fuese el abuelo de cada uno, los lugares más emblemáticos de Quart, como el cauce del río Turia, la Quarta Milla, la acequia, el ambulatorio... y a su patrón San Onofre. Al principio del documental aparece Alberto y la voz en off de José Marzo relatando qué es de lo que Alberto a veces se acuerda, y de qué no.
Francesc Vicent Nogales, tutor de la clase, quería enseñar la cuestión del municipio, que entra en el temario, de una forma creativa para dotar de sentido al aprendizaje. Esta actividad se llevó a cabo dentro de la metodología «Aprendizaje basado en proyectos». Los alumnos de tercero diseñaron el documental en las asignaturas de sociales, para estudiar el municipio; naturales, ya que Quart de Poblet cuenta com un amplio espacio natural; lengua, para crear los diálogos y el guion que han sido fruto de la imaginación y conocimientos de los niños; y en la asigantura de matemáticas, que trabajaron los planos de la localidad y los kilómetros que hacían cuando visitaban las diferentes instalaciones del pueblo.
Las familias y otros vecinos de Quart también se han involucrado en la creación del documental aportando fotografías antiguas del municipio, como del hogar del jubilado o de la ermita. Tanto el Ambulatorio como el Ayuntamiento también les ayudaron dejándoles entrar y grabar en sus instalaciones. La concejala socialista Cristina Mora, aparece en el corto realizando una visita guiada del ayuntamiento para explicar quién y en qué trabajan. «Ha tenido muy buena acogida por parte de todos los ciudadanos e instituciones locales», afirma.
«Ha sido el proyecto más bonito y emocionante en el que he participado», cuenta Francesc. No dudamos de que haya sido así por la carga emocional que supone el documental. La figura de Alberto, encarnada por Miguel, un abuelo de un niño de la clase que se ofreció para participar, es un personaje del que cada persona puede sentir como su familiar y esto emociona.
« Todos hemos tenido a un familiar enfermo al que hemos querido ayudar desesperadamente, y aquí este es Alberto. Todos los niños y niñas de entre 8 y 9 años han unido su ingenio para poder tender la mano a este anciano que cada uno de ellos ha sentido como su «su abuelo», y recordarle todos los lugares de su municipio», concluyen.
