Las niñas y los niños fueron este miércoles al atardecer los grandes protagonistas del nuevo viaje de Sant Roc por las calles de Burjassot. ¿En cuál de sus traslados no lo han sido? La ermita del Peregrino, junto al patio de los Silos, se llenó de cañas, calabacitas y lazos de colores con la esperanza de mejorar la vida en cualquier parte del mundo. Allí, en el santuario, se congregó buena parte de esas personas que llevan clavados en el corazón "los pins de sus amigos y sus amigas, sus seres queridos".

Tras la tradicional Bendición de las Cañas, la infancia honró a Sant Roc con el encendido de miles de cohetes durante el recorrido que "el médico sin fronteras" cubrió desde la ermita hasta la iglesia de San Miguel Arcángel. Esta ruta, asentada desde hace tiempo en Burjassot, constituye la célebre Baixà y Rodà infantiles del Patrón. Antes de concluirla, en la plaza del Ayuntamiento sus protagonistas "rodaron" al santo con la luz de las bengalas.

Acompañada de sus familias, de los clavarios, de la Penya El Coet, de las autoridades municipales con el alcalde, Rafa García, al frente y de muchos otros vecinos, la jovencísima "banda de Roc" lo bordó en su homenaje al "amic i amat" de la Ciudad de los Silos. Las flores, piropos y otras galanterías a Roc y su banda de niños y niñas no se hicieron esperar. "Visca Sant Roc", lo resumía todo.

Después de la Rodà en la plaza, la fiesta continuó por las calles del Nucli Antic hasta llegar a la casa de San Miguel. A las puertas del templo, los pequeños recibieron al Patrón en medio de la luz de numerosos cohetes. La Agrupación Musical Los Silos puso la banda sonora. Sant Roc permanecerá en San Miguel hasta el regreso a su ermita este viernes por la noche -su día grande- en las tradicionales Pujà y Rodà.

Los actos de la Baixà y Rodà infantiles del miércoles, enmarcados en la Nit de la Pólvora, aún se prolongaron con la exhibición piroténica que, pasada la medianoche, ofreció la Penya El Coet con su Gran Coetà. Poco antes las pirotecnias Tamatit y Mediterránea ya empezaron a pintar el cielo con sus "mascletades nocturnes" en honor de Sant Roc. Un espectáculo.