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Reforma

Arranca la fase final de la remodelación de los Silos

Se inicia la construcción del contrafuerte del muro que se derrumbó

Colocación de estructuras de hierro para el encofrado del talud. v. ruiz sancho

Los trabajos para la construcción del «toblerone» de hormigón que «asegurará la estabilidad» del muro noreste de los Silos de Burjassot, ubicado en el paseo Concepción Arenal, ya están en marcha. Tras la remodelación del tramo desmoronado de pared -el que cayó bajo una tromba de agua en la madrugada del 18 de septiembre de 2018- y la reposición de la parte de enlosado de la explanada del monumento -el «pati de Sant Roc»- que el desplome arrastró consigo -ambas obras concluidas en la primera quincena de agosto, como avanzó Levante-EMV durante las fiestas de Sant Roc-, la empresa restauradora -EMR Restauración y Conservación- ha emprendido la que podría considerarse última fase de su labor en cuanto a la rehabilitación de la muralla: que no vuelva a derrumbarse.

Los obreros iniciaron el martes el montaje del encofrado donde se moldeará el prisma triangular que actuará como contrafuerte del muro a lo largo de sus 75 metros de longitud. Primero colocaron lienzos de unos dos metros de altura sobre la pared y a continuación instalaron las primeras estructuras de hierro junto a la misma.

Este talud de contención, elemento añadido al conjunto arquitectónico y que no estará «pegado» al muro, se asentará sobre los micropilotes que los trabajadores ya instalaron en el subsuelo junto al muro, en febrero, para reforzar la cimentación de la nueva pieza. Se trata de 71 tubos de acero de 15 centímetros de diámetro (divididos en dos piezas de tres y dos metros de longitud unidos mediante otra de unos 20 centímetros) rellenos de cemento.

La edificación del macizo triangular tiene la función de «contrarrestar la bajada de nivel del terreno del paseo Concepción Arenal realizada en los años 30 del siglo pasado». Esta actuación urbanística, según se desprende de la reunión que mantuvieron a principios de año los técnicos de la obra con la asociación Amics y Amigues de les Sitges y representantes municipales, dejó «desprotegida la muralla» y pudo constituir «la causa principal de su desmoronamiento» hace un año. La colocación de la nueva pieza arquitectónica -semejante a un «toblerone»- vendría a remedar aquel rebaje de terreno.

El contrafuerte del muro estará dividido en cuatro partes ya que no se tapiarán las tres puertas de acceso a algunos de los silos donde hace siglos se almacenaba grano. La Conselleria de Cultura y Patrimonió decidió reabrir el acceso a los depósitos 25 y 29 - «redescubierto» después del desplome del muro- y de mantener abiertos los otros dos: la entrada al balconcito desde donde se puede ver el interior del silo 41, próxima a la plaza del Ayuntamiento, y la que comunica los seis silos -4, 3, 2, 7, 6 y 1- cercanos a los «embarronats». Estos días la empresa restauradora también se encuentra preparando el mantenimiento de los tres accesos.

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