Siete activistas permanecen acampados desde anoche en el exterior de la alqueria "forn de barraca", en termino municipal de Alboraia y junto a la V-21 para evitar el «inminente derribo de este importante elemento patrimonial por las obras de ampliación de dos nuevos carriles de la autovía». Según explican hoy mismo está previsto que comiencen los trabajos preparatorios para derribar la alquería mediante la desconexión de la red eléctrica.

Los manifestantes consideran que la obra de ampliación de la V-21, «promovida por el Ministerio de Fomento con el beneplácito de la Generalitat, es inecesaria, supone un gasto público multimilionario y una pérdida de terreno de huerta productiva que echaremos en falta en los tiempos que se avecinan». Por ello reclaman «un debat público urgente sobre esta y otras obras y actuaciones como el nuevo plan general de Alboraia, o la ampliación del puerto de València que destruyen l'Horta para establecer un criterio racional a la hora de invertir los recursos públicos que tengan en cuenta la emergència climática». Y concluyen: «Cualquier debate sobre la cuestión será bienvenido, y también la solidaridad con la lucha en defensa de la huerta».