Su nombre casi ya le predestinaba a convertirse en un gran patinador. Javier Hernández aunque no quiere imitar al campeón del mundo de patinaje sobre hielo Javier Fernández porque lo suyo es el patinaje artístico sobre cuatro ruedas, si le gustaría emular sus éxitos deportivos.

Este sillero es un alumno aventajado del equipo Príncipe de España de Picassent, ya que con solo once años va acaparando trofeos en su corta carrera. El último el de campeón autonómico alevín conseguido en el torneo celebrado en Alberic, que le permitió clasificarse para el Campeonato de España alevín de patinaje artístico que tendrá lugar del 18 al 20 de octubre en Zaragoza. Clasificación conseguida no por proclamarse campeón -en la categoría masculina suelen participar muy pocos patinadores- sino porque su ejercicio fue valorado muy positivamente por los jueces y obtuvo los puntos necesarios para la clasificación nacional.

«Yo le he dicho que vaya a por todas, que se mentalice para ganar y sino gana que esté muy satisfecho con su trabajo porque la verdad es que está trabajando un montón», asegura Toñi, su madre.

Toñi cuenta que desde siempre a él no le gustaba el fútbol como a sus amigos, le gustaba mucho bailar y decidí apuntarle al club Xen Silla de patinaje sobre ruedas, y le encantó», explica.

Tal es así que pronto avanzó superando a niños de más edad «y llegamos a un momento en el que él mismo me pidió que quería ir a otro club con más nivel y entonces vinimos al Príncipe de España de Picassent».

Y allí ha encontrado su sitio, ya que ha empezado a participar en campeonatos territoriales y su entrenadora está muy contenta con él.«Javi está un poco nervioso porque aquí en su categoría hay poco chico y no tiene mucha competencia, pero en Zaragoza competirá con otros 16 niños y ahí verá su nivel, pero va a presentar una coreografía muy completa y a ver hay suerte», comenta su madre, «estaremos allí en Zaragoza para aplaudirle haga lo que haga porque se lo está currando mucho».