El pleno municipal de Paiporta ha aprobado con el apoyo de todos los grupos la propuesta de Compromís para declarar una situación de emergencia climática en la localidad y establecer compromisos para la reducción de gases de efecto invernadero, apostar por energías renovables, el consumo responsable y de proximidad y la movilidad sostenible.

Según recoge la moción, el cambio climático es una evidencia científica y nos encontramos ante una situación de emergencia climática que sólo la ponen en cuestión los representantes de las entidades responsables de este problema. El planeta, los seres vivos y los ecosistemas están en peligro como lo confirman los recientes informes de la IPBES (Plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas) y del IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change), que alertan de una situación que lleva a la extinción de una gran parte de los ecosistemas terrestres y marinos. No responder a esta grave crisis ecológica supondría la muerte de millones de personas, además de la extinción de especies imprescindibles para la vida en la Tierra, dadas las complejas interrelaciones ecosistémicas.

El escrito aprobado señala que hay que actuar con responsabilidad y aceptar la realidad de la crisis climática y la gravedad de la situación. Las instituciones y la ciudadanía deben entender y atender la urgencia de la lucha contra el cambio climático y el Ayuntamiento de Paiporta ha de desempeñar un papel clave en la información y educación sobre la necesaria reducción de las emisiones, además de adoptar todas aquellas medidas que dentro de su marco de competencias ayudan a evitar el aumento de la temperatura global y mejorar la salud y el bienestar de las personas.

Aunque durante la pasada legislatura, el Gobierno de Compromís en Paiporta invirtió más de 800.000 euros en medidas contra el cambio climático, "la declaración de emergencia climática supone asumir el cumplimiento de compromisos políticos reales y vinculantes, mucho más ambiciosos que los actuales, con la consiguiente asignación de recursos para hacer frente a esta crisis", señala Pep Val, concejal de Urbanismo y Medio Ambiente. Una hoja de ruta vinculante "capaz de garantizar las reducciones de gases de efecto invernadero anuales, abandonar progresivamente los combustibles fósiles, apostar por una energía 100% renovable y reducir de manera progresiva hasta cero las emisiones de carbono, en la línea de las indicaciones del informe del IPCC para limitar el aumento de las temperaturas a 1,5 ° C ", según explica Val.

Según Isabel Martín, alcaldesa de Paiporta, "la declaración de emergencia climática implica continuar con más fuerza todavía un proceso de educación, formación y concienciación de toda la población sobre la verdad de la crisis ecológica y el cambio necesario para frenar la situación actual. Es por ello por lo que ante esta situación y para iniciar el proceso de transformación social y asegurar la plena consecución de los objetivos, Compromís propuso una serie de medidas ".

En primer lugar, se establecerán los compromisos políticos, normativas y recursos necesarios para garantizar reducciones de gases de efecto invernadero para llegar al balance neto antes de 2.035, así como detener la pérdida de la biodiversidad y restaurar los ecosistemas como única respuesta posible para evitar un colapso de todos los sistemas naturales, incluyendo el humano.

En segundo lugar, se aplicarán políticas de abandono progresivo de los combustibles fósiles, apostando por una energía 100% limpia, verde y renovable de manera urgente y prioritaria. Por lo tanto, desde el Ayuntamiento de Paiporta se debe analizar cómo conseguir este objetivo y proponer planes de actuación necesarios; entre otros, apostar por inversiones medioambientalmente sostenibles, conseguir el pleno autoconsumo energético 100% renovable y una movilidad sostenible, fomentar medios de transporte no contaminantes y espacios sin tráfico, promover el aumento de la eficiencia energética y la inversión en instalación ciones que utilizan renovables, crear espacios educativos de información para concienciar a la población sobre la situación de emergencia climática y conseguir políticas de residuo cero.

Además, también se potenciará y facilitará la economía local, que impulse la soberanía alimentaria y una agricultura y ganadería ecológica de proximidad. Por otro lado, iniciar la necesaria adaptación de los municipios a la crisis climática.

Y, finalmente, se protegerán los entornos naturales, como la zona forestal del barranco de Chiva, del que ya se ha presentado el nuevo plan de incendios forestales, ya que los árboles y la vegetación en general minimizan el impacto de la crisis climática.