El consistorio remodela la plaza del Castell para conventirla en una zona verde peatonal sin tráfico donde el vecindario podrá salir a la puerta de casa para tomar la fresca y jugar, en el caso de los más jóvenes. Estas obras de remodelación acabarán en las próximas semanas vísperas de las festividad de Navidad, y se mejorará la accesibilidad y con esto la seguridad de los peatones.

Las mejoras han consistido en un cambio de suelo por materiales aislantes con azulejos, la incorporación de árboles dentro de la plaza y colocación de bancos porque los vecinos y las vecinas descansan. Además, han incorporado unas nuevas escalas más accesibles con una barandilla que ayudará los más mayores porque las suben con más facilidad, y también una rampa lateral para el acceso de personas con movilidad reducida o carros de bebés entre otros, eliminado barras arquitectónicas.También se ha modificado la rampa de vehículos anterior, por una nueva donde tan solo tendrán acceso aquellas personas con un garaje dentro de la plazoleta o un vado.

Por otro lado, con la colocación de estas dos rampas se ha mejorado la visibilidad, puesto que antes la salida era peligrosa por la invisibilidad total de la calle y era la misma tanto por la salida como por la entrada de vehículos y peatones.

La alcaldesa, Cristina Civera, explica que estas obras fueron aprobadas en la legislatura anterior dentro del programa SOMOS de la Diputación de València.