El Ministerio de Fomento ha confirmado al Ayuntamiento de Xirivella que en unas semanas comenzarán las obras para elevar la pasarela peatonal que conecta la ciudad con València y que tiene un elevado uso por parte de peatones y ciclistas. El paso tiene una barandilla, a un lado, y un pequeño muro de hormigón al otro, cuya altura la convertía en peligrosa, en opinión de personas usuarias.
El alcalde de Xirivella, Michel Montaner (PSPV), ha explicado que, ya en el pasado mandato, cuando gobernaba con Compromís, su socio Ricard Barberà en la alcaldía (en la etapa que le tocó por turno estar al frente del pleno) reclamó al ministerio por escrito esta obra que, no obstante, no se ejecutó. «La situación es peligrosa tanto para las personas que cruzan el puente caminando como para aquellas que lo hacen en bicicleta, según se han quejado los usuarios al ayuntamiento. De hecho, se ha producido algún accidente. Por eso hemos estado pidiendo que elevaran ambos lados», narra el alcalde Montaner.
Xirivella está conectada a la ciudad de València a través de esa pasarela para las personas que acuden a pie o en bicicleta. Y dada la mala comunicación en transporte público, por la falta de frecuencia de los trenes y lo largo del trayecto, y por el obsoleto servicio de autobuses, «son muchas las personas que optan por caminar o ir en bicicleta cada día», manifiesta el alcalde.
Queja constante
De este modo, cuando el socialista renovó la alcaldía, contactó con Fomento para insistir en la petición. «Hemos hecho llamadas diarias y enviado numerosos escritos. Hemos mantenido una queja constante y finalmente nos han escuchado», opina Montaner. Además de los contactos con el ministerio, el alcalde también ha acudido, en este tiempo, a la Demarcación de Carreteras del Estado en València para trasladar el problema.
Finalmente, hace unos días, desde el Ministerio de Fomento contactaron con alcaldía para informar de la ejecución próxima del proyecto que consistirá en elevar tanto la valla metálica como la de hormigón unos 50 centímetros sobre la medida actual para proporcionar más seguridad y ser también un elemento disuasorio.
«La seguridad ha de ser primordial en estas infraestructuras y a nosotros nos corresponde velar por las personas», ha concluido el alcalde Montaner.
