Volvieron las obras a los Silos de Burjassot. El contrafuerte que ya asegura la estabilidad del muro norestecontrafuerte del monumento -un prisma triangular de unos 75 metros de longitud por unos dos de altura adosado a la histórica muralla de unos cinco de alto levantada en el siglo XVI en lo que ahora es el paseo Concepción Arenal- se hará más largo. La misma empresa que repuso el tramo de pared desplomado tras un temporal y construyó el prisma de refuerzo, EMR Restauración y Conservación, alargará el contrafuerte en una docena de metros de longitud en dirección a la calle Escritor Hernández Casajuana.

Este espacio, contiguo al muro, corresponde a una de las fachadas laterales de uno de los dos almacenes de superficie del monumento conocidos como «embarronats». La obra se veía venir: cuando los obreros concluyeron la edificación del «toblerone» de hormigón y cubierto con ladrillos adosado al muro, no enladrillaron el extremo junto al edificio del «embarronat» que da al paseo, por lo que no pocos vecinos intuyeron la prolongación del contrafuerte.

Si la construcción del mismo fue un remedo del terreno natural que, antes de su rebaje realizado en la década de los años 30 del siglo pasado, reforzaba el muro, es lógico que esta solución constructiva -el contrafuerte- también se aplicara a los cimientos del «embarronat», que igualmente quedaron a la intemperie tras la nivelación del terreno para hacer el paseo Concepción Arenal. En el caso del almacén de superficie, además del terreno, también actuaba como contrafuerte un aljibe cuya edificación se remonta a 1582, poco después del levantamiento de la muralla. Huelga decir que la histórica cisterna también desapareció tras el rebaje del terreno.

Las nuevas obras en el paseo Concepción Arenal, iniciadas este miércoles por la mañana, se producen tras una declaración de emergencia por parte del Ayuntamiento de Burjassot para acometer la remodelación del «embarronat», un edificio apuntalado en su interior desde hace meses y prácticamente en ruina.

El consistorio burjasotense, que cuenta con la autorización del Ayuntamiento de València -como propietario del monumento- y de la Conselleria de Cultura y Patrimonio, se encargará de sufragar las obras del alargue del contrafuerte y de la reforma del «embarronat», que, entre otros trabajos, incluye «la consolidación de la estructura del edificio, la protección de sus frescos interiores en la medida de lo posible y la reparación del tejado», según fuentes municipales. Para afrontar el pago de las obras, el Ayuntamiento de Burjassot dispone de «una subvención de 130.000 euros procedente de la Diputació de València».

La empresa adjudicataria ha empezado por cavar una zanja junto a la fachada del «embarronat» donde, como ya hizo bordeando el restaurado muro noreste, se alzará -con micropilotes de refuerzo en el subsuelo- la continuación del contrafuerte que ha de «calzar» una parte importante de los cimientos de uno de los dos antiguos almacenes de superficie de los Silos.

El alcalde Rafa García explica que “seguimos dando pasos para poder consolidar la situación del Patio de Los Silos, y vamos a seguir buscando las soluciones que nos permitan, entre todos, llegar a una rehabilitación total del conjunto monumental. Hay que aunar esfuerzos y seguir trabajando por y para poner en valor el Patio de Los Silos, patrimonio de todos las valencianas y valencianos”. El dirigente señala el “agradecimiento en la celeridad de los trámites tanto del Ayuntamiento de Valencia, que ha autorizado la ejecución de estas obras de emergencia, como de Dirección General de Patrimonio, y por supuesto, de la Diputación de Valencia por su ayuda y apoyo”.