El pleno del pasado mes de enero aprobó la moción presentada por el grupo de gobierno para declarar la emergencia climática en Godella con el apoyo de todas las fuerzas políticas, salvo de Unides Podem EU, que se abstuvo.

De esta forma, la concejala de Medio Ambiente, Natalia Garrido, afirmó que el Ayuntamiento de Godella se compromete a tomar las medidas necesarias para intentar detener el cambio climático. "El modelo socioeconómico actual ha generado un cambio climático en el que España es muy vulnerable, ya que es un punto caliente. Así, nos planteamos centrar los objetivos en el consumidor, de manera que podamos establecer un plan de vivienda sostenible y un nuevo plan general de urbanismo y movilidad. Además, queremos impulsar la reducción de emisiones, apostar por las energías renovables, y adoptar medidas de adaptación al cambio climático", concluyó Garrido.

El Partido Popular propuso medidas como el cambio del autobús municipal, y establecer más puntos de carga para los vehículos eléctricos.

La representante de Unides Podem EU, Irene Ferré, instó al gobierno a concretar medidas que se reflejen en acuerdos reales, hecho que representó en una enmienda, que fue rechazada con los votos en contra de Comprimís y el Partido Socialista, y la abstención del Partido Popular y Ciudadanos.