El colectivo Per l’horta, miembro de la Federación Intervegas denuncia el cierre de mercados agroecológicos y municipales en ciudades como Murcia, Zaragoza o localidades de Mallorca. En la Comunitat Valenciana no hay una prohibición expresa, pero muchos no han abierto por desinformación. El sector productivo agroalimentario de proximidad garantiza el suministro y el abastecimiento alimentario ante la presente crisis sanitaria. Tras la declaración de estado de alarma, reclamamos que se mantengan abiertos los mercados agrícolas de proximidad: ferias, mercados municipales y de abastos, de carácter diario o semanal, con el mismo tratamiento que los super e hipermercados.

La red de mercados locales, de abastos y el pequeño comercio agroalimentario de proximidad, han servido tradicionalmente como espacios de abastecimiento de productos frescos de calidad. Esta red se conserva en la mayor parte de España y hoy en día es un modelo a imitar en otros países, ya que dinamizan el territorio, favorecen la sostenibilidad medioambiental y minimizan los residuos plásticos. Los mercados de proximidad, son además los canales de distribución que utilizan muchos productores locales, tanto en el sector agrario como en la ganadería y la pesca. Los comercios en los que, al contrario que en las grandes cadenas de distribución, se paga un precio justo al pequeño productor.

Entendemos que en un momento de alerta sanitaria se eviten las aglomeraciones y por tanto se decrete el cierre de centros educativos, restaurantes, discotecas, museos etc. Sin embargo, no es comprensible que en ciudades como Murcia o Zaragoza o en poblaciones de Mallorca, mientras se producen grandes aglomeraciones en grandes superficies y supermercados, se haya aprobado o se está contemplando el cierre de comercios de alimentación y mercados de proximidad. En València no ha abierto “la tira de comptar” agroecológica de Mossen Sorell por la semana fallera, pero sí el mercado de Godella. Estos espacios ofrecen un trato personalizado y de confianza, y un nivel de seguridad alimentaria comparable al de las grandes superficies. El contexto de crisis sanitaria en ningún caso puede justificar su cierre. Algunos medios están difundiendo un mensaje erróneo, por el cual sólo se puede adquirir alimentos en supermercados, pero todos los comercios de alimentación y mercados alimentarios de la Comunidad Valenciana tienen permiso de apertura.

Por todo ello, y ante la presente situación de crisis sanitaria, la Plataforma Intervegas hace un llamamiento para:

1- Apoyar el sector agroalimentario de proximidad, los mercados de venta directa, municipales, de abastos y los pequeños comercios, es fundamental. Deberían ser considerados por todas las administraciones públicas como un sector estratégico y de primera necesidad, al menos al mismo nivel que los supermercados e hipermercados. Constituyen canales de comercialización esenciales para asegurar la viabilidad económica de los pequeños productores y una alternativa para el consumidor, ya que ofertan productos locales, frescos, ecológicos y de temporada. Valores imprescindibles que no suelen atender los sistemas de distribución basados en grandes superficies.

2- Proteger la agricultura familiar, la pesca y la ganadería local es de justicia social, fortalece al sistema alimentario local y mejora su capacidad de resiliencia. Es necesario que los responsables políticos aprovechen esta crisis para apoyar el sector productivo local y limitar la dependencia con otros países. Es necesaria una normativa estatal que asegure la protección y dinamización de los suelos de interés agrario y especialmente los de alto valor agrológico para mejorar nuestra capacidad de autoabastecimiento.