Desde que el pasado 16 de marzo se decretó el estado de alarma a causa de la pandemia provocada por el COVID-19, la vida cotidiana ha sufrido un cambio radical. La suspensión de las clases, las restricciones de movilidad y ahora, desde hace unos días, la paralización de toda actividad económica, excepto aquella que es esencial, ha provocado que muchas familias vulnerables, que ya de por sí encuentran en circunstancias de dificultad, ahora se encuentren con el gran problema de no poder hacer frente a los gastos económicos habituales.

"Desde el Ayuntamiento, no podemos permitir que, ante una crisis como la que estamos viviendo, nadie se quede atrás, sobretodo aquellas familias vulnerables con menores a su cargo y que ahora, más que nunca, necesitan que la Administración Local, la administración pública más cercana, les ofrezca el apoyo y las garantías necesarias para no verse excluidos del bienestar social al que todas y todos tenemos derecho", afirma la alcaldesa, Conxa García.

Por este motivo, el Ayuntamiento de Picassent, a través de la concejalía de Servicios Sociales está estos días redoblando esfuerzos, tanto a nivel humano como económico, con el fin de atender las necesidades básicas de las familia más necesitadas. Así, desde que se inició esta situación, se han destinado un total de 21.028,56 euros en gasto de alimentación, suministros de agua, luz y gas, y recibos de alquiler. Además, se han destinado 130.000 euros del superávit a este tipo de ayudas con el fin de garantizar su cobertura.

"El equipo de Servicios sociales estamos trabajando presencialmente al 100 % dedicando todos nuestros esfuerzos para que a nadie le falte lo más básico" afirma el concejal de Bienestar Social, Carles Silla.

Hay que recordar que, mientras dure el confinamiento, la atención de Servicios Sociales se realiza vía telefónica. En caso de necesitar algún tipo de ayuda o información, hay que llamar al teléfono: 96 122 20 18, en horario de 9 h a 14 h.