La desescalada prevista para recuperar la normalidad, tras la pandemia, ha provocado que otros dos municipios de l'Horta anuncien que suspenden sus fiestas patronales: Massanassa y Manises, que además son los primeros en el calendario cada año. Su decisión se suma a la de la Federació de Moros i Cristians de Torrent, que ya decidió hace semanas que las capitanías pasaban al año próximo, o la del mismo colectivo en Sedaví.

En Manises, el gobierno local se reunió el martes, de manera telemática, con las principales asociaciones festeras de la ciudad para tomar una decisión alrededor de las fiestas patronales, las fiestas de Moros y Cristianos y las Fallas. Los dos primeros colectivos, de manera voluntaria y altruista, decidieron donar la subvención o parte de la misma a gastos que puedan surgir ante la actual pandemia sanitaria.

En cuanto a la reunión mantenida con la Clavaría de las Santas Justa y Rufina, la decisión final ha sido suspender las fiestas patronales por una cuestión, sobretodo, de responsabilidad social. El Ayuntamiento abonará la parte de la subvención ya invertida en la compra de cerámica para la Cabalgata de la Cerámica, trabajo que desde la Clavaría empieza a hacerse desde principio de año, para poder estar todo a punto para el 18 de julio. La subvención restante, será donada al Ayuntamiento para gastos relacionados con la crisis sanitaria del COVID19 como pueden ser la compra de material de protección o las ayudas sociales.

Por su parte, las comparsas de Moros y Cristianos de Manises han decidido también suspender las fiestas de julio y rechazar la totalidad de la subvención de este 2020 en favor de los gastos que puedan surgir a causa del Coronavirus. En este caso, la situación es diferente a la de la Clavaria debido a que el colectivo de los Moros y Cristianos todavía no había realizado ningún desembolso para las fiestas de este año y por tanto, no pueden justificarlos.

Por último, en la reunión mantenida con las Fallas de Manises, se aclararon cuestiones relacionadas con la subvención, la cual se abonará en su totalidad puesto que todos los gastos estaban hechos y se podrán justificar sin problema. Además, el consistorio manisero, ofreció la posibilidad de ceder un local a las fallas que no tienen opción de guardar el monumento fallero. En todo momento se trasladó a la familia fallera que se apoyaría la decisión que tomaran, siempre que estuviera dentro de la legalidad exigida por las circunstancias actuales.

Una vez finalizada la reunión con el alcalde y el concejal de Fiestas, y después de hablar los 11 presidentes y el presidente de Junta Local Fallera, aparecía en sus redes sociales anunciada su decisión sobre dar por finalizado el ejercicio fallero de 2019/2020 y posponer la celebración de la semana fallera en 2021.

Tanto el alcalde de Manises, Jesús Borràs i Sanchis, como el concejal de Fiestas del Ayuntamiento de Manises, Carles López, presentes en la reunión virtual quieren agradecer especialmente la solidaridad y comprensión de los festeros y festeras frente a la delicada situación que estamos viviendo en la actualidad.

En Massanassa, el alcalde Paco Comes ha emitido un bando en el que informa a la población de la decisión "unánime" de suspender las fiestas de Sant Joan 2020 para preservar la seguridad de la ciudadanía. El mandatario indica que no es la primera vez en la historia que se han de suspender las fiestas por causas graves, por lo que está convencido de que el municipio superará este "paréntesis" por una situación excepcional.

"Espero que la ciudadanía de Massanassa comprenda esta medida, que tenemos que tomar por el bien de todos, con la seguridad de que es un paréntesis que nos dará fuerzas y sabiduría", indica Comes.