La actuación para construir un puente que conecte la ciudad de Torrent sobre el barranco con otro tramo del corredor comarcal (el de la rotonda distribuidora del tráfico hacia Alaquàs y Aldaia) desde la autovía CV-36 va tomando forma tras la parada durante el momento de mayor crisis de la pandemia.
Operarios y responsables de las empresas adjudicatarias de este proyecto realizaron ayer una inspección de la marcha de la obra de esta infraestructura, que supondrá otro acceso más a la parte baja de la capital comarcal.
El Consell construye este nuevo puente (el quinto sobre el barranco en el término municipal) con una inversión de unos 3,4 millones de euros y que ha de ejecutarse a lo largo de 18 meses. La infraestructura tendrá una longitud de 78 metros y una anchura de 22 metros, con dos calzadas separadas de dos carriles por sentido. También dispondrá de un carril bici de tres metros de anchura y una acera de 2,40 metros.
El alcalde de Torrent, Jesús Ros, se ha mostrado satisfecho con la marcha de esta obra, que calcula que se podrá utilizar en el último trimestre de 2021. El mandatario defiende que este puente era necesario para descongestionar el histórico que une Alaquàs con Torrent y también algunas arterias de la propia ciudad ya que «el tráfico que venga de esa zona pero vaya a la parte alta del casco urbano, podrá tomar este puente y conectar con la ronda de la ciudad, de forma que acabe en el Parc Central, sin tener que pasar por Doctor Gómez Ferrer, la calle València y Camí Reial o la propia avenida», valora el alcalde. También en el consistorio torrentino se considera que el nuevo puente evitará los colapsos del antiguo a ciertas horas del día.
Los otros pasos
A lo largo del término municipal, Torrent tiene otros cuatro puentes sobre el barranco: el Pont Blau, en la zona industrial; el del Mas del Jutge, que une el polígono con el Corredor comarcal; el histórico «Pont d'Alaquàs», que conecta la ciudad con el pueblo vecino y con parte del Alter, y el que enlaza el corredor comarcal con la autovía CV-36.
