Los consistorios de l'Horta han duplicado las ayudas sociales y otras prestaciones durante los meses de confinamiento, tal y como arroja n los balances que están realizando esta semana.

De este modo, el Ayuntamiento de Paterna ha destinado 872.560 euros a ayudas sociales desde que se iniciara la crisis sanitaria de la Covid-19 para atender a familias vulnerables y/o en situaciones precarias.

Así lo ha detallado la concejala de Inclusión Social, Isabel Segura, quien ha explicado que se decidió "reforzar la estructura del departamento y los recursos económicos para poder atender a todos los paterneros y paterneras que han necesitado ayuda para poder hacer frente a la nueva realidad, así como a aquellos que ya eran atendidos por nuestros servicios".

Según los datos del Área de Inclusión Social, desde el pasado 14 de marzo, se han llevado a cabo más de 20.000 asistencias, entre las que se encuentran llamadas recibidas para atender dudas y solicitar ayudas, llamadas de control y seguimiento para detectar posibles necesidades, repartos de lotes de alimentos en los barrios más vulnerables de la ciudad, entrega de material escolar para niños y niñas en situación precaria o reparto de pañales y leche de lactancia a familias con bebés.

Además, se han concedido 1.279 ayudas económicas directas para paliar situaciones de urgencia, modificando partidas presupuestarias a fin de fortalecer los recursos para los vecinos y vecinas del municipio. En esta línea, Segura ha afirmado que "se ha realizado un esfuerzo inmenso por parte de trabajadores del área de Inclusión Social así como de la empresa municipal Gespa para que en Paterna nadie se quede atrás, tratando de abarcar las necesidades económicas, psicológicas y asistencia de todos los paterneros y paterneras que lo han necesitado".

Uno de los colectivos al que se ha prestado especial atención por su especial vulnerabilidad ha sido al de los menores. Además de las ayudas directas a familias y el reparto de alimentos, se les ha proporcionado material escolar, tarjetas SIM, en colaboración con Jovesolides, para permitir que continuaran su formación online, atención psicológica directa y seguimiento exhaustivo de los casi 1.000 a los que el área presta atención habitualmente, además de los que se encuentran en centros de menores.

Asimismo, se ha reforzado el seguimiento y el apoyo para mujeres víctimas de violencia de género, y, también, el Ayuntamiento se ha unido a la campaña Mascarilla 19 en las farmacias de Paterna para la detección de posibles casos. También, el área de Inclusión Social ha creado perfiles propios en redes sociales (Paterna Inclusiva) para informar, concienciar y sensibilizar respecto a la igualdad y a la inclusión como herramientas para una sociedad más solidaria.

Por otro lado, entidades como AFEMPES, Fundación Secretariado Gitano, Cáritas la Coma, Jovesólides, Cáritas San Pedro, Crecer en la Coma, Cruz Roja, o las concejalías de Sanidad y de Educación, han colaborado en el traslado de necesidades especiales para así llevar a cabo acciones y medidas coordinadas.

Por su parte, el Ayuntamiento de Quart de Poblet ha doblado sus esfuerzos en el apoyo psicosocial de toda la población lo que se ha traducido en más de 2.500 atenciones realizadas, de las cuales 829 han sido personas atendidas por primera vez en la Unidad de Trabajo Social (UTS) de Información de Servicios Sociales, el triple de las que se llevaron a cabo en el mismo periodo de 2019.

Ayudar en los procesos de duelo y actuar ante el aislamiento de personas solas, realizar intervenciones ante casos de ansiedad o de miedo al contagio, mediar en temas de custodia entre progenitores separados y en conflictos intrafamiliares, atender situaciones de recaída de adicciones o de escasez de recursos son algunas de las actuaciones del equipo municipal de psicólogas, que ha atendidom a 200 familias.

Otro de los ejes centrales ha sido el Servicio de Atención a la Familia y a la Infancia. Este departamento pudo llegar a 154 familias y 150 niños, niñas y adolescentes que se encontraban en situaciones de vulnerabilidad. Los motivos de la intervención han variado dependiendo de la situación o necesidades. Informar sobre aspectos como la beca comedor y la solicitud de otras ayudas económicas ha sido primordial durante este periodo, del mismo modo que proporcionar pautas educativas, especialmente en el caso de los y las adolescentes.

En todo momento se ha asegurado la protección y el seguimiento de los y las menores, actuando en aquellos casos en los que se sospechaba una situación de desamparo, posibles negligencias por parte de los progenitores o personas tutoras, maltratos o abusos, entre otras cuestiones.

Toda esta labor ha debido realizarse bajo las restricciones de movilidad decretadas, por lo que el ayuntamiento adaptó el tipo de atención para poder realizarla de manera telemática asegurando la continuidad del servicio.

En total, el equipo de atención psicológica y socioeducativa ha realizado más de mil llamadas telefónicas, un centenar de intervenciones por WhatsApp, 29 vídeollamadas y casi medio centenar de atenciones presenciales. Además, se difundieron cinco vídeos de apoyo psicológico en los que se trataban diferentes cuestiones, como el cuidado de los cuidadores o el acompañamiento a personas mayores.

Junto a estas atenciones, también se han realizado 323 trámites, relativos a ayudas sociales, como los vales de alimentación o el cheque de lactancia, el servicio de atención domiciliaria o las Prestaciones Económicas Individuales (PEIs) para casos de emergencia, al tiempo que se han seguido tramitando los expedientes de Dependencia y de la Renta Valenciana de Inclusión, entre otros.

El trabajo realizado desde Bienestar Social se ha caracterizado por su colaboración de otras áreas municipales y coordinación con otras instituciones, asociaciones y actores sociales. De hecho, se ha intensificado aun más si cabe, la relación con los centros educativos, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, el Centro de Salud, el Centro de Día, las áreas de Educación, el Consejo Independiente de Protección de la Infancia o la Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil (USMI), así como otras asociaciones del municipio.