Después de siete meses de funcionamiento, el movimiento de voluntariado Coronavirus amb Cor de Alaquàs ha decidido dar un paso más y crear una asociación que pueda actuar en el futuro inmediato ante las nuevas necesidades sociales que ha traído la pandemia. Por ello, el grupo celebró una jornada presencial en el Castell, en la que dio luz verde a la constitución «Cor de Vila», que estará coordinada por un equipo de 13 personas, con Lourdes Pascual en la presidencia. Junto a ella estarán Marieta Alfonso, José Antonio Murillo e Isabel Cosme, como vicepresidentes, así como Pura Palop en la secretaría y Elena Guillén como tesorera. Habrá asimismo seis vocalías que ocuparán Marta Murciano (Educación e Igualdad),Javier Giménez (Acción Social), Vicente Jaime Silla (Logística), Lluís Portalés (Coordinación de voluntariado), Lute Fernández (Cultura), Laura Sena (Comunicación) y Paco Pons (Relaciones Externas y Financiación).

La jornada en el Castell se inició con la canción «Utòpis, idealistes, ingenus» del cantautor Pau Alabajos (prestada al grupo semanas para un vídeo) y la aparición de un personaje histórico, el «tio Allioli», que interpretó el investigador local Adrià Hernández.

La presidenta Lourdes Pascual resaltó, entre las propuestas, la creación de un grupo de apoyo mutuo para el voluntariado, préstamo de objetos, intercambio de favores y donaciones, e insistió en que Cor de Vila será un espacio «donde cabe todo el mundo».

Por su parte, el director de la Fundació Horta Sud, Julio Huerta coordinó las comisiones de trabajo. Entre los objetivos están fomentar la alimentación saludable, luchar contra la brecha educativa y fomentar una cultura inclusiva.

En su trayectoria de seis meses, Coronavirus amb Cor realizó 800 compras y gestiones para mayores, repartió 5.000 lotes de alimentos, promovió 15 recetas saludables entre las familias con menos recursos y participó en el teléfono de atención a las familias que se sentían solas, entre otros.