Tras varios meses de espera, los técnicos de la Confederación Hidrográfica del Júcar atendieron a la demanda de los alcaldes de Catarroja y Massanassa y visitaron el barranco que hace de medianero entre ambas localidades y donde desde hace tiempo se producen filtraciones de agua que al estancarse en el lecho originan muchas molestias a los vecinos de olores y plagas de mosquitos.

Jesús Monzó (Compromís) y Paco Comes (PP) acompañaron a los técnicos de la CHJ a ver el lecho del barranco y pudieron presenciar la salida de agua continuada que puede tener varias explicaciones. Según apuntas fuentes municipales, pueden tratarse de aguas limpias a causa del nivel freático o de proceder de la acequia de Favara, que también pasa por el barranco y podría en algunos momentos aliviar allí agua. O en la peor de las situaciones podrían ser aguas fecales ya que en el lecho del barranco existe un colector que a priori está en desuso tras hacer una variante en Paiporta, «pero cuando hay un colapso por fuertes lluvias hay una serie de aliviaderos que desembocan en este colector, lo que es un problema no solo por las molestias a los vecinos sino porque ese vertido va directamente a l’Albufera», explica Monzó. Es por eso que ambos alcaldes han pedido una reunión con el presidente de la CHJ «para pedirle que anule el colector para asegurarnos de que las aguas fecales no lleguen al Parc Natural»,, explica Comes. Ambos confían en tener pronto esa reunión que le aporte una solución lestancamiento de agua en el lecho.