Massamagrell dejará de tener en su callejero una avenida dedicada a Joan Fuster. Así lo decidió el pleno, al salir adelante una moción de la formación de ultraderecha Vox para rebautizar esta vía con el nombre de Enrique Senent, edil del PP fallecido en activo en junio. La moción fue aprobada gracias a la abstención del partido que gobierna en minoría, el PSPV, ya que el apoyo no era suficiente con los votos a favor de PP, Vox, Cs y de Veïns de Massamagrell, y el rechazo de Compromís y Unides Podem.
Todo empezó en junio cuando el pleno aprobó dedicarle una calle tanto al párroco también fallecido Blas Sales como Senent, que murió en activo tras 21 años en el consistorio. Si bien se dejó medio claro que el párroco podría darle nombre a la plaza del campanario, para el concejal solo se aprobó que fuera una arteria principal y no causara graves problemas.
Fue Vox quien asumió la iniciativa esta semana en el pleno argumentando que la calle Joan Fuster era la más apropiada porque era una avenida principal y sin casas residenciales, «lo que impediría causar molestias a los vecinos». Vox aseguraba que en su propuesta «no había tintes políticos».
Por su parte, Compromís, que lidera el exalcalde Pep Galarza, pidió la retirada de la moción para poder consensuar una calle que sea aprobada por unanimidad por el pleno, algo que también quería el gobierno, pero el PP no aprobó la retirada. «No lo entendemos porque deberían ser ellos los que propusiesen la calle para su compañero», critica Galarza además de considerar un sin sentido «quitar el nombre de Joan Fuster una calle para ponérselo a otro sin haberlo consensuado antes». Compromís, antiguo socio de gobierno en la anterior legislatura, también lamenta que «el PSOE siga permitiendo que VOX los marque las líneas a seguir, muestra de la extraordinaria debilidad con la que gobiernan los socialistas en Massamagrell».
El portavoz del PP y ex alcalde, Miguel Bailach, asegura que no estuvo en el pleno al estar confinado por un positivo en su entorno laboral, por lo que dice no saber por qué sus compañeros votaron en contra de retirar del orden del día esta moción sin un consenso previo. «Nos hubiera gustado que fuera una propuesta consensuada pero si un partido propone una calle para nuestro compañero no nos podemos negar, no creemos que seamos nosotros los que debamos proponerlo», afirma.
Una «falta de consenso» que el alcalde Paco Gómez asegura también haber echado en falta. «Lo lógico hubiera sido consensuar una calle en una comisión previa», explica, pero esto no se hizo y el PSPV decidió seguir adelante y votar abstención alegando que «la moción de Vox era correcta, no atendía a criterios políticos».
Un tinte político que ya se encargó de promover el edil de Vox José Carlos Grau en las redes sociales donde ha dejado claras las intenciones de su moción y se jacta de haber conseguido quitarle una calle a Joan Fuster, «ese traidor de la llengua valenciana y del Regne de València» como ha calificado al autor de «Nosaltres els valencians», sin ni siquiera apuntar que esa vía se llamaría ahora Enrique Senent. «Ayer conseguimos quitar la calle Joan Fuster del callejero de nuestro pueblo. Animemos pues a otros a seguir el ejemplo y calificar a este señor como se merece», dijo ayer, además de comparar a Fuster con Tejero y decir que una calle con el nombre en Massamagrell del principal ideólogo del nacionalismo valenciano es igual que «si en Nueva York hubiera una calle dedicada a Bin Laden».
Fuera de la Emshi por homófobo
No es la primera vez que las declaraciones del edil de Vox generan polémica. En septiembre de 2019 se le retiró su condición de representante de la Emshi por sus opiniones homófobas en contra el Orgullo Gay. Precisamente fue Enrique Senent, portavoz del PP entonces, el que propuso la moción para retirarle de su puesto y mostrar su repulsa.
El PSOE pide ahora que el centro cultural se llame Joan Fuster
El alcalde Paco Gómez asegura estar consternado por las manifestaciones del edil de Vox «que ha tergiversado el espíritu de la moción» y ayer presentó por registro otra para que en el próximo pleno se apruebe renombrar al centro cultural como Joan Fuster i Ortells. Aunque fue su abstención la que ha permitido el acuerdo, en su registro condena «la utilización partidista» de la moción por parte de Vox, «contradiciendo y desvirtuando el trasfondo (...) y faltando al respeto a Enrique Senent y a Joan Fuster, referente de la cultura valenciana». «Espero que ahora Compromís y UP voten a favor y no se alíen con el PP como con la bajada del IBI», expresa el, alcalde.
