El comité de huelga de la escoleta municipal de Rocafort ha decidido suspender los paros programados todos los martes y jueves, después de que el ayuntamiento haya abierto una vía de diálogo con el objetivo de solventar el conflicto laboral que denuncia una parte de la plantilla de docentes desde hace años.

Tal como avanzó este diario, el pasado 16 de octubre, la mitad de la plantilla docente de la Escoleta Municipal de Rocafort inició una huelga indefinida todos los martes y jueves, para reclamar mejoras de su situación laboral: el complemento específico, una remuneración reflejada en la nómina en consonancia con la responsabilidad de cada empleado/a del ayuntamiento, además de ajustar el sistema de control de horario y contrataciones transparentes. El primer día de paro sorprendió a numerosas familias, de las que 26 tuvieron que marcharse y buscar alternativas para dejar a sus hijos.

Fue en febrero cuando el comité de huelga anunció paros todos los martes y jueves a partir de abril. La pandemia cerró las instalaciones, pero el conflicto se mantuvo, ya que, las profesoras llevaron al juzgado los servicios mínimos que fijó el ayuntamiento para la huelga prevista desde abril. El juzgado de lo contencioso dio la razón al comité de huelga, al considerar «insuficiente» la «motivación» del consistorio para los servicios mínimos que fijó: un 100% de la jornada a la profesora/directora y un 80% a las técnicas de educación infantil.

Apenas dos semanas de huelga después, las partes han abierto una vía de diálogo para alcanzar un acuerdo. Por este motivo, y como muestra de buena voluntad, las maestras convocantes han decidido suspender los paros, también entendiendo el problema que está causando a las familias sus reivindicaciones.

La previsión es que los abogados de ambas partes se sienten a mitad de este mes para tratar de solventar los puntos de conflicto y alcanzar un acuerdo que satisfaga a maestras y ayuntamiento.