De forma discreta y casi como un mero formulismo, se ha firmado la recepción de las obras de construcción del colegio Ciutat de Cremona de Alaquàs, más de tres años después de que se rubricara el contrato. Una vez el edificio está totalmente acabado, la Conselleria de Educación ha tomado posesión de este inmueble, que ya está equipado. Aunque con retraso, este paso ya hace que la historia de construcción del centro llegue al capítulo final, tras años de batalla y reivindicaciones por parte de la comunidad educativa y el municipio.

El CEIP Ciutat de Cremona se creó hace más de una década y se proyectó con tres líneas, para un alumnado de más de 500 personas. Después de años en barracones, la Conselleria de Educación, en la etapa del PP, recortó las líneas de tres años, lo que en la práctica impedía la matrícula de más escolares, en lo que las famnilias vieron una maniobra para cerrarlo y no construirlo.

Aquella situación provocó el nacimiento de la Plataforma Tots Som Cremona, con el objetivo de trabajar junto a la asociación de madres y padres (AMPA), que emprendió fuertes movilizaciones además de captar adhesiones de numerosas asociaciones de dentro y fuera de la población. La más sonada fue un encierro de 100 días en el que las familias pernoctaron por turnos en el centro, mientras que se desarrollaba una amplia programación cultural revindicativa con conciertos, actuaciones y talleres.

Con la llegada del Govern del Botànic, la construcción del colegio se licitó en octubre de 2016 por 5,4 millones y finalmente el contrato se firmó en noviembre de 2017 por 4,5 millones. El desarrollo de la obra, no obstante, ha sido muy accidentado y se han ido acumulando retrasos.

Estreno de infantil

El pasado septiembre, los grupos de infantil sí que pudieron estrenar el colegio, al estar acabado su edificio, mientras el restro siguió en los barracones. De forma paralela a la recta final de los trabajos, el consistorio está realizando una mejora urbana en el acceso al centro educativo.

El conseller de Educación, Vicent Marzà, se congratula de que "el CEIP Ciudad de Cremona de Alaquàs ya es una realidad". "Después de mucho trabajo, hemos formalizado la ocupación del edificio de Primaria. En unas semanas, los niños y niñas irán a clase en un edificio digno, dónde pondrán su impronta personal de color con dibujos en las paredes, libros a los rincones de lectura y vida a los pasillos y patios que ahora están vacíos”, valora.

“Queda mucho menos para que el magnífico equipo de profesorado pueda trabajar en espacios con condiciones para desplegar sus proyectos pedagógicos. Cuando se acabe la limpieza y se haga el traslado, las familias estarán a la salida de clase de una construcción complicada, que por fin hemos hecho realidad con el trabajo de mucha gente. Gracias a la comunidad educativa del CEIP Ciudad de Cremona para recordarnos siempre de donde venimos y jefe donde vayamos”, añade el conseller.

Por su parte, el director general de Infraestructuras Educativas, Víctor Garcia, agradece "la enorme implicación de profesorado y familias para hacer realidad este momento de acabado de las obras, que marca la firma del acta de ocupación del nuevo colegio". "La comunidad educativa del CEIP Ciudad de Cremona ya tiene acabada su merecida y necesaria escuela. Una vez firmada el acta de ocupación, solo queda que el profesorado y el alumnado de Primaria (lo de Infantil ya lo está desde el inicio de curso) se establezcan en lo sientas nuevos espacios durante las próximas semanas y esperamos que puedan disfrutar mucho de sus nuevas aulas. Con unas infraestructuras dignas podrán realizar todavía mejor el gran trabajo educativo que hacen cada día y nos tendrán siempre a su lado", concluye.