En la localidad de Godella, se ha creado una iniciativa para que las personas dejen de tirar las colillas al suelo cuando anden por la zona de campos, ya que en estos, no se dispone de papeleras como si ocurre en el resto del pueblo.

Por ello, David López ha creado esta iniciativa para contribuir con su granito de arena al medio ambiente, ya que las colillas en el suelo tardan en descomponerse y son perjudiciales para la tierra por todos los elementos químicos que contienen.

El sistema creado por este vecino consiste en reciclar una garrafa de agua de cinco litros, dandole la vuelta, «anclada a un palo para clavarla en el suelo». Previamente se realiza un agujero en la parte superior en el cuál se indique el lugar por donde se deben depositar las colillas, como se deben apagar «utilizando una tapa de bote de cristal». En el fondo de la botella, se introduce un poco de agua con el tapón cerrado para que no se derrita el plástico y se apaguen las colillas. Posteriormente, se abrirá el tapón para deshacerse de ellas en la basura.

Un sistema aparentemente sencillo, pero que puede ser efectivo para cuidar el medio ambiente. Y es que esta idea viene dada por el amor a la naturaleza que tienen David y su familia quienes, en sus ratos libres, aprovechan para hacer escapadas a la playa, a la montaña, al río... Y es por ello, que durante sus rutas veían la suciedad que se acumulaba en la tierra. Por ello, tanto David como su mujer han enseñado a sus hijos, desde bien pequeños, los valores de cuidar la tierra y, en consecuencia, han impulsado esta iniciativa, apostando por el reciclaje de garrafas de agua convertidas en auténticos ceniceros para viandantes que paseen por los campos.

Imitación

Según David, otros vecinos y amigos se están sumando a la iniciativa en sus pueblos con el fin de disfrutar de los paseos en un ambiente más limpio.