Lleva la política en las venas. Su abuelo Juan García fue concejal en Alaquàs. Su padre, Juan García Campos, fue el número dos de los gobiernos locales de la popular María José Català en Torrent, hasta que falleció. Su tía, Elvira García Campos, fue alcaldesa socialista durante 10 años en Alaquàs, tras estar diversas legislaturas como concejala. Y su tío Paco Pons (marido de la anterior) fue director general en la anterior etapa del PSPV en la Generalitat Valenciana. Y ahora, Arturo García Gil ha dado el paso de presentarse a la presidencia del Partido Popular de Torrent, con el objetivo de dar «cohesión» a la agrupación y «recuperar la ilusión» del electorado, perdida por las sucesivas derrotas en las instituciones.

García Gil, profesor de secundaria y bachiller en el colegio Madre Josefa Campos de Alaquàs y a punto de cumplir los 46 años, lleva militando en el PP desde su mayoría de edad, inicialmente desde Nuevas Generaciones. En el terreno personal, está casado, tiene cuatro hijos y forma parte de la asociación de madres y padres del colegio de educación especial la Unión, donde acude uno de ellos.

A lo largo de los años de militancia, el edil afirma haber apoyado a todos los candidatos y candidatas a la alcaldía que ha tenido el partido. En el año 2018 entró en la corporación municipal como concejal del PP, al correr la lista por las dimisiones de Jorge Planells y Javier Noguera. Y en 2019, el partido volvió a contar con él para la candidatura porque generaba «consenso», por lo que repitió y además fue nombrado portavoz adjunto en el grupo municipal.

Y cuando se convocó el congreso local de Torrent para finales de abril, decidió presentarse, en parte, porque en su casa «siempre se ha respirado la política y la vocación de servicio («mi padre ha sido un referente para mí y también mi tía», asegura) y, en parte, porque le animaron compañeros del partido. «No soy el candidato de nadie», afirma García, aunque parte con el respaldo de la actual dirección que lidera Vicente Soria y de la mitad del grupo municipal, además del sector de María José Català en la agrupación.

Su objetivo es aportar «cohesión» y consenso a una asamblea local fracturada y «contar con todo el mundo». Por ello, si gana, afirma que apostará por «una ejecutiva plurak y sin exclusiones».

Desde la legislatura anterior son patentes las malas relaciones entre la actual portavoz municipal, Amparo Folgado, candidata en 2019 y exalcaldesa, con una parte del grupo municipal y la dirección local. Arturo García, no obstante, señala que Folgado, que posiblemente será su rival en el congreso, «sigue siendo un activo en el partido y una persona muy valiosa».

Respecto a si su movimiento puede traducirse en el futuro en una candidatura electoral, García Gil deja claro que «ahora se está votando la dirección local y cada proceso tendrá su tiempo».