El trabajo de los Servicios Sociales municipales de los últimos meses ha conseguido reducir a la mitad el tiempo de espera para hacer las valoraciones de las situaciones de dependencia de la ciudadanía que ha necesitado acogerse a estas ayudas.

Durante el primer estado de alarma y el confinamiento ante la Covid19 decretado ahora hace justamente un año, la situación no permitió realizar las valoraciones domiciliarias sobre las ayudas a la dependencia. Este hecho ocasionó que se pasara de los 6 meses de espera a los 9 meses en el mes de julio, fecha en la cual se consiguió poder volver a las valoraciones de las situaciones en los domicilios.

En la actualidad el tiempo de espera desde que la persona hace la solicitud hasta que los servicios técnicos del área de Bienestar Social hacen la valoración, es de 3 meses. En 2020, se registraron 214 nuevas solicitudes y se realizaron 247 valoraciones.

El concejal de Bienestar Social, Carles Silla, destaca que la «reducción ha sido gracias a la ampliación de la plantilla de los Servicios Sociales, que cuenta ya con una trabajadora social más y al esfuerzo de todo el personal del área».